Para su cumpleaños, Lucy Roy no pidió fiesta ni regalos. En vez de festejos típicos, Roy decidió pedir recibir la vacuna contra el COVID-19. Roy acaba de ser elegible para recibir una vacuna, ya que cumplió 12 años.
Roy dijo que igual que todo mundo, sintió que la vida paró por COVID-19 en marzo del año pasado. Debido a protocolos de distanciamiento social y la propagación del virus, Roy dejó de verse con sus amigas al comienzo de la pandemia.
También dejó de cenar con sus abuelos los fines de semana, ya que su abuelo se consideraba de “alto riesgo” de contraer el virus. “Fue muy difícil no abrazar ni a él ni a mi abuelita”, le platico Roy a las noticias de WSAZ.
A solo meses de iniciar la pandemia, Roy empezó la secundaria y sólo pudo asistir un día en persona antes de que regresara al aprendizaje virtual. “Ni siquiera tuve un año normal. Fue un poco difícil aprender cómo funciona la secundaria”, dijo Roy.
Cuando supo qué vacunas contra el virus se volvieron disponibles a inicios de este año, decidió que quería inocularse contra el virus. Con esperanzas de volver a la normalidad, le preguntó a su mamá cuándo podría recibir su vacuna. Su mamá le dijo que tendría que cumplir 12 años antes de recibirla.
Semanas antes de que cumpliera años, Roy pidió el regalo que quería: la vacuna contra COVID-19. El 31 de agosto, el día de su cumpleaños, Roy recibió su primera dosis.
Roy dice que es muy importante para ella estar vacunada, ya que más niños de su edad han contraído el virus.
“Puedo ir a ver a mis abuelos. Puedo ver a toda mi familia sin preocuparme de que no los estoy protegiendo o protegiéndome”, dijo Roy. Ya que todos de su familia están vacunados, ella espera que este invierno puedan celebrar la navidad en persona en vez de por videollamada.
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