La nueva variante del COVID-19 que se detectó en África ha provocado que una gran cantidad de países detuvieran los viajes aéreos provenientes desde el sur del Continente.
"Lo último que necesitamos es traer una nueva variante que causará aún más problemas", dijo el ministro de Salud alemán, Jens Spahn.
Esta situación se dio en medio de un aumento masivo de casos en los 27 países de la Unión Europea, que recomienda la prohibición de vuelos desde naciones del sur de África.
A los pocos días del descubrimiento de la nueva variante, ya ha impactado en un mundo nervioso que es sensible a las malas noticias de COVID-19.
Los expertos médicos, incluida la Organización Mundial de la Salud, advirtieron contra cualquier reacción exagerada antes de que todos los elementos fueran claros.
Las naciones que actuaron dijeron que sus preocupaciones estaban justificadas.
“Los primeros indicios muestran que esta variante puede ser más transmisible que la variante Delta y las vacunas actuales pueden ser menos efectivas contra ella”.
"Debemos actuar con rapidez y lo antes posible", dijo el secretario de salud británica, Sajid Javid.
Bélgica se convirtió en el primer país de la Unión Europea en anunciar un caso de la variante.
“Tenemos un caso de esta variante que está confirmado. Es alguien que vino del extranjero”, señaló el ministro de Salud, Frank Vandenbroucke.
“Es una variante sospechosa. No sabemos si es una variante muy peligrosa”, añadió.
Israel, uno de los países más vacunados del mundo, anunció que también detectó el primer caso de la nueva variante en el país, en un viajero que regresó de Malawi.
La nueva variante infectó inmediatamente los mercados de valores de todo el mundo. Los principales índices cayeron en Europa y Asia.
La OMS advirtió que no se apresure a sacar conclusiones demasiado rápido.
“Hemos visto en el pasado, en el momento en que hay algún tipo de mención de cualquier tipo de variación y todos están cerrando fronteras y restringiendo los viajes”.
“Es realmente importante que permanezcamos abiertos y concentrados ", dijo Michael Ryan, jefe de emergencias de la OMS.
Los Centros Africanos para el Control y la Prevención de Enfermedades estuvieron de acuerdo y "desaconsejan enérgicamente la imposición de la prohibición de viajar para las personas originarias de países que han informado de esta variante".
El Reino Unido anunció que prohibía los vuelos desde Sudáfrica y otros cinco países del sur del Continente a partir del mediodía del viernes 26 de noviembre.
Solicitándole a cualquier persona que haya llegado recientemente de esos países que se someta a una prueba de coronavirus.
El Ministerio de Salud de Italia también anunció medidas para prohibir la entrada a Italia de cualquier persona que haya estado en siete naciones del sur de África en los últimos 14 días.
Los Países Bajos y la República Checa están planificando medidas similares.
El gobierno japonés anunció que los ciudadanos japoneses que viajen desde Eswatini, Zimbabwe, Namibia, Botswana, Sudáfrica y Lesotho deberán ponerse en cuarentena.
El gobierno sudafricano dijo en un comunicado que "la decisión del Reino Unido de prohibir a sus ciudadanos ingresar al país parece haberse apresurado".
Actualmente identificada como B.1.1.529, la nueva variante también se ha encontrado en Botswana y Hong Kong en viajeros de Sudáfrica.
El grupo de trabajo técnico de la OMS se reunirá para evaluar la nueva variante y puede decidir si le da un nombre del alfabeto griego.
Dice que las infecciones por coronavirus aumentaron un 11 % en Europa la semana pasada, la única región del mundo donde COVID-19 continúa aumentando.
Con información de Associated Press.
MÁS NOTICIAS RELACIONADAS: