Una "clínica" clandestina en Quito, Ecuador, que inyectaba una sustancia desconocida vendiéndola como vacuna contra el coronavirus, fue clausurada por la policía en un operativo conjunto con otras autoridades de control.
Tras denuncias ciudadanas, las autoridades acudieron al lugar, que en el ejercicio de actividades económicas estaba registrado como "spa y centro de masajes de adelgazamiento", nombre que durante la pandemia cambiaron por “centro de tratamiento contra la COVID-19“, explicó César Díaz, Secretario de Seguridad de Quito.
Al momento, en el sector de Caupicho 2, al sur de Quito, intervenimos @MunicipioQuito junto a @Inten_Pichincha, @Acess_Ec, @PoliciaEcuador en una clínica en la que supuestamente se colocaba vacunas contra el Covid-19 pic.twitter.com/iPCRRRPRZR
— César Díaz Álvarez (@Cesar_DiazA) January 26, 2021
A su llegada, las autoridades encontraron a un gran número de personas esperando turno para la aplicación de la supuesta vacuna. Supuestamente, los pacientes tenían que recibir tres dosis con precio de 15 dólares por inyección. Posteriormente, se les administraban dos sueros, uno "lavable" y uno "multivitamínico" por 25 y 70 dólares.
En el momento del operativo, en el centro clandestino muchas personas esperaban su turno para la administración de la supuesta vacuna contra la COVID-19. Los pacientes tenían que recibir tres dosis, cada una a un precio de 15 dólares. Después de ese tratamiento se les administraban dos “sueros”, uno “lavable” y uno "multivitamínico" por 25 y 70 dólares, respectivamente.
"Con eso los pacientes quedan papelito (‘inmunes’)", aseguró la mujer que atendía el lugar, que no contaba con papeles para dar esa clase de servicios. Además, ella aseguraba ser especialista en medicina alternativa, lo cual fue desmentido por las autoridades.
https://twitter.com/MunicipioQuito/status/1354228019683012611
Después de las investigaciones pertinentes, la policía descubrió que la "clínica" había suministrado 70 mil vacunas de la sustancia que hasta el momento se desconoce su fórmula. Las autoridades incautaron el resto de las dosis para investigar su compuesto.
"Están jugando con la emoción, con el dolor, con la impotencia de los ciudadanos vendiendo este tipo de sustancias", dijo César Díaz.
Las autoridades informaron que el Ministerio de Salud es la única organización autorizada para distribuir la verdadera vacuna contra el coronavirus.