Muchos latinos sueñan con hacer de los sabores de sus países de origen un negocio, emprender y eventualmente abrir un restaurante. Sin embargo, hay cosas que pueden costarle dinero, tiempo y hasta el negocio.
Dalton Espaillat, un empresario dominicano que hoy opera 19 establecimientos, principalmente gastronómicos y ubicados en Charlotte, comparte su experiencia en la industria de comida y revela que se necesita para tener éxito.
Dalton ha triunfado y a su vez cerrado más de una decena de restaurantes. Cuenta que a pesar de que algunos de estos no tuvieron éxito, les dejó lecciones valiosas sobre cómo se debe administrar un establecimiento. Aclara que la persistencia es clave, pero también entender un principio muy importante: “Aprender cuesta dinero”.
“Todos los errores que se comenten en negocios se pagan con dinero y con tiempo, no hay nadie que te pueda decir ‘lo siento mucho y ya’. No, tú vas a pagar estos errores y vas a tener que aprender, porque si no te ajustas vas a seguir perdiendo”, advierte y explicó cuáles son esos errores que pueden afectar la economía de su emprendimiento y cómo evitarlos.
- Revisa tus finanzas antes de abrir un negocio
Antes de abrir o invertir en un restaurante, Dalton recomienda revisar bien las finanzas. “Siempre hay que mirar los números y ver la cosa objetivamente”, dijo. En especial, precisó que hay que fijarse en el porcentaje de gastos y que idealmente estos sean:
- Mano de obra: no debe superar entre el 30 % y 35 % de las ventas mensuales
- El costo de comida también debe mantenerse entre el 30 % y 35 %.
- El alquiler del local no debería pasar del 10 % de lo que se vende.
“Basado en cuánto estaba vendiendo, entonces te das cuenta si es algo factible o no, porque ya luego si solo te queda un 20 % con ese se van a pagar los servicios, si solicitaste un crédito vas a pagar los intereses y otros gastos”, dijo.
Para estimar el costo real de la comida, hay que considerar lo que se gasta en insumos para servirla como:
- Vasos
- Cajas o bandejas para llevar
- Cubiertos plásticos
- Servilletas
- Bolsas
- Tapas
- Pajillas, popotes, entre otros
“Yo siempre me he metido con negocio existente que cerraron y creo algo nuevo, pero algo que hago es revisar lo que ellos vendían para hacer una proyección de lo que yo podría vender y que porcentaje quedaría al final de esta suma. Ese número es importante”, añadió.
- El primer año y medio es clave
Una de las reglas más relevantes, según el empresario, es darle al restaurante al menos un año y medio para evaluar si realmente funciona. “Tienes que esperar, pero mientras tanto si vez que algo está funcionando, síguelo haciendo así y si después del año y medio no ves progreso, no va a funcionar y podrías tener que cerrarlo, porque si sigues haciendo la misma vaina, vas a recibir los mismos resultados”, advirtió.
Explica que un restaurante en crisis suele vender alrededor de $5,000 semanales, lo cual no es suficiente para cubrir gastos básicos ni mantener empleados. Cuando comenzó, se encontraba en una situación similar: manejaba cuatro restaurantes que no generaban casi dinero y esperaba al menos alcanzar los $7,500 a la semana para cubrir lo invertido, por lo que tuvo que tomar decisiones importantes para ni llegar al año y medio y tener que cerrarlos, entre ellas:
- Cambiar el menú
- Que el equipo de trabajo sea pequeño, pero productivo
- Adaptarse a los cambios
- Establecer metas realistas
- El personal debe ser eficiente, no numeroso
Para el empresario, la mano de obra es el gasto más alto que suele tener un restaurante, por eso recomienda contratar y pagar estratégicamente. Precisó, además, que un buen empleado debe tener múltiples funciones para que sea eficiente y se debe evitar sobrecontratar.
“Si tú tienes muchos empleados, vas a tener costos de comida más altos, tanto por lo que ellos comen como porque como no van a tener mucho que hacer, entonces van a cocinar de más y esa comida, al final de la jornada, habrá que botarla”, indicó.
Otro aspecto al cual se refirió fue el pago de estos empleados. “Si estás pagando de más y esto no corresponde a lo que producen, no hay forma de que generes dinero para el negocio… Obviamente, uno quisiera poder pagarle a todo el mundo hasta $50 por hora, pero si no pueden producir eso por hora, entonces los números no te van a dar”.
- Adáptate al cambio
Durante la pandemia, Dalton explica que su negocio prosperó gracias a la preparación que realizó para las entregas a domicilio. Pero cuando el público volvió a salir, lo entendió rápido: “La gente quería experiencia, por eso me metí en MaBí para ofrecer una experiencia en la que ellos pudieran salir, disfrutar, pasar un buen tiempo”.
Aclara que, para que un negocio prospere, debe ser capaz de entender lo que buscan los consumidores y adaptarse a ese cambio.
- ¿Cómo establecer metas realistas?
Dalton aclara que el crecimiento de un negocio de comida no es inmediato, sino que este toma tiempo y para ser realista, debe proyectarse de un 10 % a un 30 % al año una vez que se empiece a vender.
“No hay forma humana de crecer un negocio de $5.000 a $10.000 de una semana a otra, eso no existe. Tú puedes crecer un 10 % o 20 % y hasta 30 % en el mismo año. Esta es una idea que hay que sacarla de la cabeza. Apunta mejor es a crecer de a poco, con un dólar que crezcas a diario, ya eso es positivo”, cerró
Esta información llega a usted gracias a una subvención de Bank of America.
