Los ataques a las subestaciones eléctricas del condado Moore provocaron que el Buró Federal de Investigaciones (FBI), esté a la búsqueda de los autores al considerarlos como terroristas domésticos.
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Los sospechosos dispararon varias veces el sábado pasado contra las subestaciones y dañaron gran parte del equipo. Alrededor de 40,000 personas se quedaron sin energía eléctrica.
Duke Energy señaló que sus empleados trabajaron turnos de 24 horas para arreglar la situación en el condado.
Tras el percance se emitió un estado de emergencia en el condado que perdura hasta este jueves 7 de diciembre.
De momento, las autoridades del condado siguen ayudando a las personas que resultaron afectadas y mantienen un refugio en el Complejo Deportivo del Condado de Moore/Centro de Recreación en 155 Hillcrest Park Lane en Carthage.
El día de ayer, 6 de diciembre, Duke Energy confirmó que tuvo que reemplazar muchos de los equipos y que esperaban tener todo arreglado para el día de hoy.
Tanto el gobernador del estado, Roy Cooper, como el FBI, consideraron que estos ataques a las subestaciones de Moore tienen un nuevo nivel que entrarían dentro de la figura de "terrorismo doméstico".
El terrorismo doméstico "implica violencia de cualquier tipo, terror y lograr el pánico". Se agrega en la ley que estas acciones se realicen "con la intención de intimidar o coaccionar a una población civil o influenciar, afectar o tomar represalias contra la política o conducta de un gobierno".
Cualquier persona que tenga información para encontrar a los sospechosos puede comunicarse a la línea de información de la Oficina del Sheriff del Condado de Moore al 910-947-4444.