La oportuna intervención de la policía en Texas evitó una masacre, pues este lunes mató a un hombre armado que entró a un campo de verano en Duncanville.
El lugar que está acondicionado para realizar deportes y acondicionamiento físico, está recibiendo a 150 niños que están ahí por las vacaciones.
La policía recibió las primeras llamadas a las 8:43 AM donde informaron de una persona armada y que había realizado disparos en la zona.
Por tal motivo, varios uniformados llegaron a la zona y se enfrentaron con el tirador, hasta que le dieron muerte.
Posteriormente, la policía aseguró que el sospechoso no ha sido identificado. Además relató que el sujeto ingresó por el vestíbulo principal, donde se encontró con un miembro del personal, quien le habría pedido que se retirara; sin embargo, este respondió con un disparo, el cual afortunadamente no hirió a nadie.
El hombre armado intentó entrar a los salones
Después de deshacerse del trabajador (quien de inmediato llamó a la policía), el sospechoso intentó entrar a un salón de clases con niños dentro, pero no pudo, sin embargo le disparó a la puerta.
Los oficiales llegaron minutos después y encontraron al sospechoso en el gimnasio, donde "intercambiaron disparos con el sospechoso", el hombre fue herido y posteriormente murió en el hospital.
Los niños fueron sacados del edificio antes de la balacera y ninguno fue herido, así como tampoco ningún trabajador.
La policía dijo que los Texas Rangers están investigando el tiroteo entre el sospechoso y los oficiales.