Remover un tatuaje que dejó de ser del gusto de quien se lo hizo puede dejar de ser algo doloroso y complicado.
Y es que el futuro del uso del láser puede proporcionar un tratamiento más eficaz para distintos casos clínicos.
Que van desde tumores cerebrales hasta esas marcas de tinta en la piel que ya no se desean.
"Observamos esos desafíos y creamos soluciones en torno a ellos utilizando nuestra experiencia en ingeniería", dijo a WRAL el neurocirujano de Duke, el Dr. Patrick Codd.
En el Laboratorio de herramientas cerebrales de Duke, en Carolina del Norte, los neurocirujanos colaboran con ingenieros de la Escuela de Ingeniería de Pratt.
Están desarrollando la próxima generación de tecnología láser robótica.
Codd cree que el núcleo de su trabajo es mejorar la precisión en la eliminación de tumores cerebrales sin afectar el tejido sano.
A medida que avanza la investigación, el equipo imagina otros posibles usos para sus láseres.
"Uno de ellos es eliminar tatuajes u otras afecciones dermatológicas", dijo Codd.
"Personalmente, no tengo ningún tatuaje lamentable, pero conozco personas que los tienen", dijo el Dr. Wes Ross, investigador postdoctoral y líder del proyecto para el desarrollo de láseres robóticos.
De un tatuaje a cirugías muy complejas
Ross piensa que los tatuajes podrían ayudar a proporcionar una "prueba de concepto" al apuntar a las moléculas de tinta debajo de las primeras capas de la piel.
"Ahora puedes entrar allí con un láser muy pequeño y trazar el contorno del tatuaje a la perfección", dijo Ross.
Su software y sistema les da la capacidad de realizar procedimientos más rápidamente y proporcionar una experiencia de eliminación de tatuajes más cómoda.
"Calienta la piel, pero no hasta el punto de quemar", explicó Ross.
El cuerpo simplemente absorbe la tinta eliminada y la elimina con un mínimo o ningún dolor o cicatrización.
El objetivo es hacer que los tratamientos con láser sean más seguros y eficientes, mejores que los métodos actuales de eliminación de un tatuaje.
"De hecho, podría reducir el precio y hacerlo más accesible para las personas que lo necesitan", agregó Codd.
Por lo pronto, el equipo reconoce que el concepto aún está a algunos años de su uso en cirugía cerebral u otros usos potenciales.
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