Un hombre enloqueció y golpeó a una enfermera hasta dejarla tendida en el suelo debido a que le puso la vacuna contra el COVID-19 a su esposa sin su consentimiento en Canadá.
El pasado lunes, el sujeto ingresó a una farmacia Brunet en la ciudad de Quebec e inculpó a la enfermera, de 40 años, de vacunar a su esposa, informó el portavoz de la policía de Sherbrooke, Martin Carrier.
"Justo al principio, el sospechoso estaba muy enojado, muy agresivo, le preguntó a la enfermera por qué vacunó a su esposa sin aprobación, sin su consentimiento y la golpeó en la cara varias veces para que la enfermera no tuviera tiempo de defenderse o explicarse ... y ella cayó al suelo y el sospechoso salió corriendo de la farmacia", detalló Carrier.
En Canadá no hay ninguna ley que establezca que los cónyuges deben de aprobar la vacuna contra el COVID-19. Hasta el momento se desconoce si la mujer aprobó la inoculación.
La enfermera fue trasladada a un hospital, donde recibió tratamiento por las múltiples lesiones que sufrió en el rostro.
Después del incidente, la farmacia decidió suspender la aplicación de la vacuna.
The Jean Coutu Group Inc., empresa matriz de Brunet Pharmacy, comunicó que "condenan totalmente este acto que es inaceptable para los equipos de farmacia que han estado proporcionando servicios esenciales desde el comienzo de la pandemia".
La policía se encuentra investigando el caso y buscando al agresor, del que no se tienen fotos, pero es descrito como un hombre de entre 30 y 45 años, 1.8 metros de altura, complexión mediana, tez oscura, cabello castaño corto, cejas gruesas, dos pequeños piercings en cada oreja y un tatuaje en su mano que parecía tener la forma de una cruz.
En Canadá se ha vacunado el 69.8% de la población, cifra que supera por un 15.6% a Estados Unidos, de acuerdo a datos de Our World in Data.