Una parada en el restaurante Don Lee's Grocery And Grill de Willow Spring, en Raleigh, le cambió la vida a un supervisor de una planta de asfalto.
Kevin Poole, originario de Franklinville, en el condado de Randolph, se paró la mañana del miércoles 2 de septiembre a comer una hamburguesa con aros de cebolla.
Con el cambio, probó suerte en la lotería con un boleto de $30.
"El electricista con el que trabajo me compró el almuerzo el día anterior. Así que yo compré este", narró Poole en el comunicado de la Lotería de Educación de Carolina del Norte.
Mientras se encontraba desayunando, Poole compró un boleto para el juego Colossal Cash de $10,000,000. Al rascarlo, encontró un premio de $1 millón.
"Me encuentro muy emocionado. Estoy construyendo una casa y me gustaría comprar más terreno”, dijo el ganador.
“Quiero construir una pista de motocross en la parte de atrás para que puedan montar mis hijos".
El hombre decidió llevarse el dinero en una suma global de $424,509 libres de impuestos.
Ahora puede cumplir uno de sus sueños tras el golpe de suerte que tuvo la mañana del 2 de septiembre.
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