Si alguien sabe cómo se tiene que trabajar para ser campeón en la NBA es Michael Jordan, quien habló con los jugadores de Charlotte Hornets y les dio las claves para tener una mejor dinámica de equipo para llegar a tener éxito.
El base de los Hornets, Devonte Graham, confesó que Jordan les dijo que no se pueden callar cuando un compañero no está haciendo bien las cosas en las prácticas o partidos, pues los errores se vuelven repetitivos.
"Te unirás mejor. Tu equipo será más fuerte. Hay más nivel de respeto, en lugar de no decir nada y dejar que los muchachos se equivoquen una y otra vez, y estás perdiendo y perdiendo", agregó MJ en la conferencia de prensa que dio fin a su documental “The Last Dance”.

Como buen guía, Michael aconsejó y platicó con sus jugadores en busca de aclarar sus dudas e inspirarlos para conseguir mejores resultados para la franquicia de Carolina del Norte, que solo ha ganado tres partidos de playoffs en la era Jordan, quien les aseguró que llegar a esa instancia es solo el primer paso, seguido de un trabajo arduo.
"Muchos jugadores de nuestro equipo no han jugado en los playoffs y no entienden la atención al detalle con el que se tienen que jugar. Eso fue lo que disfruté escuchar de MJ, especialmente como parte de un equipo joven", confesó Cody Zeller, pivote de los Hornets.
Las ganas de competir y el ADN ganador de Jordan, son uno de los ejes del famoso documental de Netflix sobre los logros del exbasquetbolista. Cualidades con las que se siente identificado el escolta de Charlotte, Terry Rozier, quien aseguro que si hubiera compartido cancha con Michael, seguramente hubieran peleado.
"Hubiera tomado la ruta de Steve Kerr. Soy súper competitivo", aseveró.
¿Jordan ofrece métodos viejos para un nuevo equipo?
Terry Rozier agregó que no está seguro de que los métodos ‘agresivos’ de Jordan funcionen en jugadores jóvenes de los Hornets, ya que es una época donde las cosas se hacen de forma distinta
"Una cosa con ser compañeros de equipo con muchachos en esta Liga es que tienes que aprender quiénes son primero. A algunas personas no les gusta que las enfrenten otras; hay que apartar a algunas personas. Así que siento que es una mezcla de aprender de tus compañeros de equipo y saber cuándo llamarlos... para que las personas no tengan mal sabor de boca", confesó el escolta.
Michael Jordan no ha estado ni cerca de emular con los Hornets lo que consiguió con los Chicago Bulls en los años noventa; seis campeonatos de la NBA. Desde que adquirió la franquicia en 2010, el equipo de Charlotte solo ha ganado tres partidos de playoffs.