La Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill anunció el jueves que las clases presenciales no empezarán hasta el 8 de febrero debido al incremento de casos del COVID-19 en el país.
El primer día de todas las clases será el 19 de enero, sin embargo, este retraso de tres semanas no afectará el aprendizaje de los estudiantes. Las clases presenciales se reunirán en línea durante tres semanas y luego comenzarán en persona.
Con casos récord de COVID-19 y hospitalizaciones en Carolina del Norte y en todo el país, la Universidad está haciendo los siguientes ajustes al semestre de primavera para brindar la mayor flexibilidad posible para un regreso seguro al campus.
Los estudiantes pueden regresar a las residencias universitarias del campus a partir del 13 de enero como estaba planeado. Además, los estudiantes tendrán la opción de regresar o retrasar su fecha de mudanza hasta el 7 de febrero.
UNC-Chapel Hill experimentó un gran incremento en casos del COVID-19 en agosto, lo cual obligó a tomar la decisión de hacer todas las clases en línea y hacer que los estudiantes se mudaron de los dormitorios y regresaron a casa.
Este semestre, todos los estudiantes que se mudan a Chapel Hill tendrán que participar en un programa de pruebas del COVID-19.
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