¡Cayó el rey de Europa! Manchester City concretó el trabajo hecho en el partido de ida de octavos de final de la Champions League en el Santiago Bernabéu y derrotó 2-1 al Real Madrid en casa.
En el primer encuentro, los pupilos de Pep Guardiola fueron a Madrid para llevarse la ventaja de 1-2 con goles de Gabriel Jesús y Kevin De Bruyne. El gol de los merengues en ese partido fue de Sergio Ramos, quien salió expulsado y no jugó el encuentro de hoy.
Real Madrid llegó a Inglaterra con la convicción de darle la vuelta al partido, pero una mala noche del central campeón del mundo con Francia, Raphael Varane, les complicó el encuentro que terminaron perdiendo.
A los nueve minutos de juego, Varane intentó hacer un recorte hacia su portería, error que aprovechó Gabriel Jesús para robarle el balón y servir a Raheem Sterling, quien definió con el arco desguarnecido.
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Benzema vacunó al Manchester City y dio esperanza al Madrid
Cuando parecía que el partido se inclinaría hacia el lado de los citizens después de aumentar la ventaja global, el Madrid entró de nuevo al juego con un desborde por derecha de Rodrygo, quien centró para que Karim Benzema igualara el marcador con un gol de cabeza al 28’.
Real Madrid volvió a estar a un gol de mandar el partido al alargue al medio tiempo.
Después de mover sus fichas en el descanso, Pep Guardiola le dio otra cara al City, que, bajo la presión alta, dominó todo el segundo tiempo.
La presión de los delanteros del Manchester City volvió a dar frutos al minuto 68, cuando Varane cometió su segundo error de la noche cuando intentó retrasar un balón con la cabeza a Courtois. Atento, Gabriel Jesús alcanzó a impactar el balón para mandarlo al fondo de la portería y volver a poner adelante a su equipo.
A falta de 28 minutos más el agregado, Madrid intentó ir al frente sin éxito. Las ideas escaseaban en un equipo dominado completamente por el Manchester City.
Zidane intentó corregir sobre la marcha e hizo varios cambios, dándole ingreso a Asensio, Vázquez y Jovic, pero nada sirvió ante un Manchester City bien plantado que en la segunda mitad controló totalmente al club más ganador de Europa.