El actor Ezra Miller continúa con serios problemas en su vida personal, ahora lo acusan de corromper a una activista adolescente que ahora tiene 18 años desde que tenía 12, mientras los padres buscan la intervención de la corte.
Te puede interesar:
¿Por qué acusan a Ezra Miller de corromper a una adolescente?
Según documentos judiciales presentados el martes en el Tribunal Tribal Sioux de Standing Rock y obtenidos por PEOPLE, el abogado y activista Chase Iron Eyes y su esposa pediatra, Sara Jumping Eagle afirman que Miller, ahora de 29 años, manipuló y controló a su hija Tokata Iron Eyes desde los dos se conocieron en Standing Rock Reservation en Dakota del Norte en 2016.
De esta forma, los padres dicen que Miller "tomó un gusto inmediato y aparentemente inocente" por Tokata en ese momento. TMZ fue el primero en informar sobre el asunto.
Los padres alegan que Miller le dio a Tokata alcohol o drogas como marihuana y LSD cuando era adolescente y exhibió un "patrón de corromper a un menor".
Chase y Sara dijeron en los documentos que Miller, a través de la organización Quiet a la que estaba afiliado el actor, se ofreció a pagarle a Tokata para que asistiera a la Universidad temprano a los 16 años en Bard College en Simon's Rock en Massachusetts.
Miller "luego usaría esto contra Tokata para crear una sensación de endeudamiento", dicen los padres en los documentos.
Tokata abandonó la escuela en diciembre. Sus padres dicen que luego viajaron a su casa de Miller en Vermont en enero y descubrieron que Tokata no tenía su licencia de conducir, tarjetas bancarias o llaves, lo que impidió que se fuera por su propia voluntad.
Tokata huyó de su hogar para reunirse con Ezra Miller
Una vez en casa, Tokata pasó tres semanas "desintoxicándose" y luego huyó a la ciudad de Nueva York, afirman los padres, para reunirse con Miller, quien luego viajó con la chica a Los Ángeles y Hawaii, donde Miller se metió en problemas legales y arrestos en los últimos meses.
Chase y Sara dicen que están preocupados por la seguridad y el bienestar mental de su hija, y que Miller muestra un comportamiento controlador, psicológicamente manipulador y similar al de una secta.
Así también, alegan que Miller “utiliza la violencia, la intimidación, la amenaza de violencia, el miedo, la paranoia, los delirios y las drogas para dominar a un joven adolescente Tokata”, según la denuncia.
Te puede interesar:
Ezra Miller no dio declaraciones por este conflicto
Ante la acusación, Ezra Miller no ha podido ser contactado, pero Tokata emitió un comunicado en Instagram el lunes con la leyenda "CONTEXTO", abordando "las suposiciones hechas en mi nombre por mi familia y amigos con respecto a mi estabilidad y otros aspectos".
"Dejé el bardo hace cinco meses, mi amigo y camarada William falleció poco después, mi mente quedó increíblemente impactada y necesitaba espacio y tiempo para procesar el duelo. Mi amigo Ezra Miller durante la totalidad de la era antes mencionada sólo ha brindado un apoyo amoroso y una protección invaluable durante este período de pérdida”, escribió Tokata.
Tokata agregó que sus padres son transfóbicos, por lo que están cegados y tienen una mala impresión de Ezra Miller.
"Mi padre y sus acusaciones no tienen peso y son francamente transfóbicos y se basan en la noción de que de alguna manera soy incapaz de tener un pensamiento coherente u opiniones opuestas a las de mis propios parientes que se preocupan por mi bienestar. Ahora soy consciente de la la severidad de la manipulación emocional y psicológica que tuve que soportar mientras estaba en la casa de mis padres. Soy un adulto y merezco sentir autoridad en mi propio cuerpo", dijo Tokata.
Tokata calificó la acción legal de sus padres como un "ataque de flagrante traición y toxicidad" que se usa para "castigarme", describiéndolo como "vergonzoso y traumáticamente alterando la vida".
Finalmente, Tokata es una activista que habló durante eventos como Supercharge: Women All In en septiembre de 2020, la Conferencia MAKERS en febrero de 2020 y All It Takes Lasting Legacy en abril de 2018.
Tokata publicó un video el domingo en el que se les ve riéndose en unas escaleras junto a Miller, quien parecía estar fumando y otro amigo.