Las autoridades en Florida ordenaron toques de queda en víspera del spring break que reúne a una multitud de juerguistas en vacaciones de primavera.
En el sur de Florida, una muchedumbre escandalosa, el consumo de bebidas alcohólicas en espacios públicos y una violencia creciente relacionada con el mundialmente famoso vecindario de South Beach de la ciudad obligaron a las autoridades a imponer toques de queda a partir de la medianoche durante el fin de semana.
Spring break da paso a la violencia en Florida
Una serie de tiroteos que dejaron cinco personas heridas en South Beach la semana pasada. Y este fin de semana un joven de 21 años de Alabama fue baleado en un pie en un tiroteo en Panama City Beach.
Esto es un abrebocas de lo que suele ser la violencia del spring break. Así que la policía adelantó que no tolerará la mala conducta que ponga en riesgo el orden.
"No hay palabras para describir la manera en que se ha comportado la multitud que ha estado aquí este fin de semana y la cantidad de leyes que se han violado", dijo el jefe de policía de Panama City Beach, J.R. Talamantez. "Estamos haciendo lo más que podemos para manejar esta situación".
La policía recibió una denuncia sobre una enorme multitud fuera de control poco antes del tiroteo registrado el domingo pasado el mediodía. Tres personas fueron detenidas y las autoridades indicaron que se les podrían presentar cargos por intento de asesinato.
Armas, ruido y caos se apoderan de las calles
En la semana se confiscaron alrededor de 75 armas de fuego, de acuerdo con el jefe policial del condado Bay, Tommy Ford. Y los arrestos superan los 160.
El área de 10 cuadras de Ocean Drive conocido por sus hoteles de arquitectura art decó, restaurantes y bares se encuentra entre ese servicio a turistas más acaudalados, y para residentes de la zona.
Muchas de las personas que viven ahí desde hace mucho tiempo han aprendido a tratar a los spring breakers como un huracán: no salir y mejor encerrarse hasta que haya pasado.
Algunos establecimientos deciden cerrar sus puertas desde Miami Beach hasta la franja noroeste del estado para lidiar con la situación.