El ciberataque en un oleoducto estadounidense desató efectos en cadena en la economía.
Colonial Pipeline, que entrega aproximadamente el 45 % del combustible utilizado a lo largo de la costa Este, cerró después de un ataque de ransomware.
El ataque fue perpetrado por parte de una banda de piratas informáticos que se hace llamar DarkSide.
Dependiendo de cuánto dure el cierre, el incidente podría afectar a millones de consumidores.
Y por lo pronto, Carolina del Norte se declaró en estado de emergencia debido a este problema.
La empresa detuvo todas las operaciones del oleoducto durante el fin de semana, lo que la compañía llamó un cierre preventivo.
Y dijo que es probable que restablezca el servicio en la mayor parte de su tubería para el viernes.
No hay un déficit inminente y, por lo tanto, no hay necesidad de entrar en pánico para comprar gasolina, dijo a AP Richard Joswick, jefe de análisis de petróleo global de S&P Global Platts.
Si la canalización se restaura antes del viernes 14 de mayo, no habrá mucho problema.
"Si se prolonga durante dos semanas, es un problema", agregó Joswick.
“Terminaría con picos de precios y probablemente algunas estaciones de servicio se quedarían sin suministro”.
“Y las compras de pánico solo lo empeoran”.
Incremento en los precios de la gasolina
El precio promedio de la gasolina subió seis centavos a 2.96 dólares durante la semana pasada y se espera que continúe subiendo debido al cierre del oleoducto, según AAA.
Mississippi, Tennessee y la costa este desde Georgia hasta Delaware son los más propensos a experimentar una disponibilidad limitada de combustible y precios más altos.
Y si el promedio nacional aumenta tres centavos más, estos serían los precios más altos desde noviembre de 2014, según AAA.
Los piratas informáticos de DarkSide son una de las docenas de bandas de ransomware que se especializan en la doble extorsión, en la que los delincuentes roban los datos de una organización antes de cifrarlos.
Luego amenazan con descargar esos datos en línea si la víctima no paga, creando un segundo desincentivo para tratar de recuperarse sin pagar.
Las bandas de ransomware dicen que solo están motivadas por las ganancias.
Colonial no ha dicho a cuánto asciende el rescate.
Colonial Pipeline no ha revelado cómo vulneraron su sistema
Funcionarios no han explicado cómo los atacantes violaron la red de la empresa y no fueron detectados.
La estructura Colonial Pipeline es una gran pieza de infraestructura crítica que proporciona suministro de combustible a los estados a lo largo de la costa Este.
Una red tan grande está obligada a tener diferentes sistemas de control a lo largo de su camino donde se conecta con distribuidores o clientes.
"Cada vez que conecta algo, corre el riesgo de infectar algo", dijo Kevin Book, director gerente de Clearview Energy Partners.
“Esa variabilidad también puede dificultar que los piratas informáticos sepan dónde encontrar vulnerabilidades”.
La Comisión Federal de Regulación de Energía ha establecido y aplicado estándares obligatorios de ciberseguridad para el sistema eléctrico a granel.
Pero no existen estándares comparables para los casi 3 millones de millas de gasoductos de gas natural, petróleo y líquidos peligrosos que atraviesan los Estados Unidos.
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