Iris Davis es una inspiración para todas las mujeres. A sus 76 años es fisicoculturista y entrena como si tuviera 17, lo que demuestra que la edad no es un pretexto para el ejercicio físico.
Esta mujer es considerada una de las pioneras del culturismo en Estados Unidos. Aunque su país natal es Irlanda. En Dublín compartía hogar con 14 hermanos en una casa de dos habitaciones. Trabajó desde los 14 años demostrando sus primeras facetas de luchadora.
La historia de motivación que la llevó a dedicarse al culturismo es lo que más destaca de su trayectoria.
Iris Davis: más allá de la motivación
La vida de Iris Davis tuvo desenlaces desde muy joven. Se casó a los 17 años y a los 18 tuvo a su primer hijo. Una desafortunada neumonía le arrebató a su retoño de apenas dos meses. Pero, no fue la única pérdida que sufrió en su juventud. También su esposo fue arrebatado en un accidente de tránsito.
Con 22 años decidió establecerse en Estados Unidos, atravesando una cruel depresión. Las primeras vías de escape para Iris Davis fueron caminar, hasta que se encontró con el culturismo, lo que convirtió en su refugio.
A pesar de que las mujeres mayores de 60 años no podían unirse a gimnasios, Iris Davis se convirtió en una especie de fundadora de la disciplina en Estados Unidos.
"Siempre he sido mi propia motivación, ya que nunca había otras culturistas femeninas a las que pudiera admirar, y aún lo sigo siendo a día de hoy", ha comentado Iris.
Sus redes sociales están repletas de fotos y videos inspiracionales que cualquier mujer debe ver.
En la actualidad, vive en Long Creek, Carolina del Sur. Ostenta premios que le recuerdan su constancia. Entrena a personas de diferentes edades en un gimnasio del estado de Georgia.
"Nunca es demasiado tarde, tengo mujeres que comienzan a entrenar conmigo con 70 años", dijo Iris.
Definitivamente hay muchas lecciones de vida detrás de esta historia que no puedes olvidar.