Un joven de Houston, quien en 2019 sobrevivió a ser atropellado por un conductor ebrio, murió este fin de semana luego de un choque y las autoridades sospechan que el conductor que impactó su auto iba alcoholizado.
Fue en mayo del 2019 cuando Clyde Thompson fue atropellado por un conductor ebrio, cuando el joven iba saliendo de una práctica de baloncesto en Aldine Senior High School.
Ese año, Thompson fue inducido a un coma, pues sufrió un gran daño en el cerebro, por lo que requirió 4 cirugías y pasó el verano en el hospital.
Con solo 50 % de probabilidad de sobrevivir, Thompson lo logró y fue dado de alta justo para iniciar su último año de escuela.
Pero la buena suerte se acabó o el destino lo alcanzó, al menos eso se podría decir.
Este fin de semana, el joven de Houston que evitó la muerte tras ser atropellado por un conductor ebrio en 2019 tuvo un accidente tras el cual murió.
Thompson estaba en Beaumont, manejando su Nissan Altima, cuando una camioneta Chevrolet lo chocó, matándolo a él y a otra pasajera, identificada como Tonysha Lashay Smith.
De acuerdo con las autoridades, la camioneta chocó de frente al auto de Thompson y se presume que el conductor iba ebrio.
Según las autoridades, Thompson murió en el lugar y Tonysha en un hospital del área.
La mamá de Thompson declaró que su hijo estudiaba rehabilitación en la Universidad Lamar para poder ayudar a otras personas que tenían problemas de lesiones como él.
El conductor que impactó a Clyde fue llevado al hospital y sus cargos aún están pendientes, informó la policía en un comunicado.
La familia de Clyde lanzó una página de GoFundMe con la que esperan recaudar fondos para pagar los gastos funerarios.
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