Toda una sorpresa se llevaron unos policías de Carolina del Norte que supuestamente iban a atender una "situación doméstica" a la zona de las montañas y terminaron arrestando a una madre y su hijo por estar en posesión de 1,400 pastillas de fentanilo.
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Los hechos ocurrieron en una casa en Race Path Church Road en Ellenboro. Agentes de la Oficina del Alguacil del Condado de Rutherford recibieron una llamada por un problema doméstico y acudieron al lugar.
Sin embargo, al llegar se dieron cuenta que había una enorme cantidad de pastillas de fentanilo prensadas. Así lo confirmó la oficina en un comunicado de prensa sobre la situación.
En el mismo comunicado la agencia explica que los agentes obtuvieron una orden de registro y llamaron a la Policía de Forest City y a la Unidad de Narcóticos del Condado de Rutherford.
Los oficiales encontraron 292.2 gramos de pastillas de fentanilo, que eran alrededor de 1,400 pastillas. También 1.3 gramos de metanfetamina, Suboxone, parafernalia de drogas y $2,685 en efectivo.
Una madre, Kimberly Johnson Atkins, de 46 años, y su hijo, Braxton Kelly Atkins de 22, fueron arrestados por las 1,400 pastillas de fentanilo. Se les acusa de tráfico de opio o heroína (nivel 3), posesión con la intención de fabricar/vender/entregar sustancias controladas de la Lista I, mantener una vivienda para sustancias controladas y posesión de parafernalia de drogas.
Además, a Kimberly Johnson Atkins también la acusaron de delito grave de posesión de sustancias controladas de la Lista I, delito grave de posesión de sustancias controladas de la Lista II y posesión simple de sustancias controladas de la Lista III.
Al joven le asignaron una fianza garantizada de $750,000, mientras que a su madre una de $765,000.
