La pandemia de coronavirus nos ha dejado cientos de historias conmovedoras e inspiradoras, desde gente que contra toda adversidad supera la enfermedad a personas que perdieron la batalla. Tal es el caso de Dick Meek y Shirley Meek, una pareja que falleció tomada de la mano días antes de recibir la vacuna contra el coronavirus.
El pasado 26 de diciembre, la pareja dio positivo en COVID-19 después de varios días con síntomas de lo que parecía una gripe común. Sin embargo, después de días con altibajos en su salud, acudieron a un centro de atención de urgencia, donde les realizaron la prueba de coronavirus. Desde ese día, su salud comenzó a deteriorarse considerablemente.
Dick tuvo que ser internado en el Coshocton Regional Medical Center el pasado 2 de enero. Dos días después Shirley fue hospitalizada en el mismo centro médico.
Desafortunadamente, la salud de ambos se fue deteriorando rápidamente y necesitaban ser trasladados a otro hospital. Después de que el personal del Coshocton Regional Medical Center abogó por el matrimonio, consiguieron que fueran hospitalizados juntos en el Riverside Methodist Hospital de Columbus, Ohio.
"Desde el 8 de enero hasta el final hubo subidas y bajadas. Había días en los que éramos realmente optimistas de que iban a sobrevivir, pero sus pulmones seguían fallando más y más cada día", explicó su hija, Debbie Howell, a CNN.
La familia quería que murieran juntos
Después de días críticos para la pareja, los médicos le informaron a la familia que a Dick y a Shirley les quedaban pocos días de vida. Sus hijos decidieron que los colocaran en la misma habitación.
"No queríamos que estuvieran separados porque eso era lo más importante de sus vidas, que estuvieran juntos", explicó Howell.
"Queríamos que estuvieran tomados de la mano. Queríamos que estuvieran juntos. Queríamos que su música favorita se escuchara suavemente de fondo", agregó.
El hospital hizo todo lo posible para que el matrimonio pasara sus últimos minutos de vida juntos. Una enfermera hizo una lista de reproducción de dos horas con la música preferida de la pareja, la cual sonaba de fondo mientras se tomaban de la mano por última vez. Shirley murió primero y minutos más tarde, Dick.
“La enfermera puso la cabeza de mi madre en el hombro de mi padre. Y se acercó y frotó el hombro de mi padre y dijo ‘Dick, puedes irte ahora. Shirley te está esperando'. Y en cuestión de minutos, se fue”, contó Howell.
La familia agradeció al personal del hospital, que hizo posible que sus padres murieran de la mano.
"Nunca tuvieron que pasar por el ‘hasta que la muerte nos separe'", dijo Howell.
Dick, de 89 años, y Shirley, de 87, tenían programado recibir la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus el 19 de enero, tres días después de su muerte y el día en que Dick cumplía 90 años. “Estaban así de cerca”, dijo su hija Vicci Harper.
La pareja, originaria de Coschcoton, Ohio, celebró hospitalizada su 70 aniversario de bodas el pasado 22 de diciembre
Shirley y Dick fueron padres de cinco hijos, abuelos de 13 nietos y bisabuelos de 28 bisnietos.
"El covid nos arrebató sus vidas, así que les rogamos a todos que se cuiden", pidió la familia.