Varios países de la Unión Europea prohibieron el domingo vuelos provenientes del Reino Unido para evitar que la nueva cepa de coronavirus o mutación que se propaga en el sur de Inglaterra no se establezca sólidamente en el continente.
Por otro lado, Alemania anunció que también considera limitar dichos vuelos por el miedo a la mutación del virus. No obstante, todavía no lo establecen como medida seria.
Mutación de virus generó alertas
Los Países Bajos prohibieron los vuelos del Reino Unido por lo menos lo que resta del año. Bélgica iniciará una prohibición de vuelo durante 24 horas a partir de la medianoche. También suspendió las conexiones en tren a Gran Bretaña, incluido el Eurostar. Austria e Italia indicaron que detendrían vuelos del Reino Unido, pero no dieron detalles del periodo de la prohibición.
El primer ministro italiano Luigi Di Maio dijo que el gobierno se preparaba para tomar medidas y “proteger a los italianos” de la variante. Aproximadamente dos decenas de vuelos estaban programados para llegar el domingo a Italia, la mayoría a la región norte de Lombardía, pero también a Veneto y Lazio, que incluyen Venecia y Roma respectivamente.
Por su parte, la República Checa impuso medidas de confinamiento más estrictas para las personas que llegan del Reino Unido.
Los gobiernos de la Unión Europea dicen que responden a las medidas más estrictas que impuso el sábado el primer ministro Boris Johnson en Londres y las áreas circundantes. De inmediato, puso a esas regiones en la Clasificación 4 de restricciones, diciendo que la nueva variante del virus, que es más de 70% más transmisible que las cepas, existentes parece impulsar una rápida propagación de nuevas infecciones en Londres y el sur de Inglaterra.
“No hay evidencia que indique que es más letal o causa enfermedades más severas”, dijo Johnson, ni que las vacunas sean menos efectivas para combatirla.
Desarrollado por La Noticia con información de AP.