El amor de un padre puede hacer muchas cosas. Esto quedó demostrado por Derek Prue, quien decidió tatuarse la marca de nacimiento de su hijo, la cual le causaba vergüenza.
Según comentó el padre canadiense, su hijo de ocho años (del mismo nombre que él) siempre usaba playeras y camisas y aún en la playa o en la alberca no se la quitaba, ya que en su pecho tiene una marca en el lado izquierdo, la cual le causaba pena mostrar.
Fue así, que para que su hijo no se sintiera solo y supiera que era apoyado, Derek decidió someterse a nueve sesiones de tatuaje, para colocarse la misma mancha que tiene su hijo.
“Pensé que sería positivo tatuarme la misma mancha, para demostrarle a mi hijo que no estaba sólo. Quería que se sintiera bien en su propia piel”.
Y aunque el pequeño no ha sido molestado por su mancha de nacimiento, sí le incomoda que sus compañeros le pregunten, pues es algo que él no puede controlar.
"Mis compañeros no se burlan de mi mancha, pero a veces me preguntan. Respondo que es sólo una gran marca marrón que vino conmigo cuando nací", comentó Derek de ocho años.
El tatuaje de la marca de nacimiento fue gratuita
El tatuador, Tony Gibbert, no cobró por la realización del tatuaje al saber el motivo de la pintura en el cuerpo del padre del pequeño.
“Esto es algo que realmente afectó para bien la vida diaria del chico, dándole más confianza, haciéndole saber que no era la única persona con esta gran marca. Ahora es para siempre”.
Durante semanas, Derek padre escondió el tatuaje, no fue hasta que estuvo terminado, que se quitó la camisera frente a su hijo que éste se entero de que ahora ambos tendrían la misma marca.