El presidente Joe Biden advirtió el jueves a las gasolineras del país que no deben aumentar artificialmente los precios. Actualmente hay una escasez temporal de gasolina debido al hackeo sucedido en el gasoducto Colonial Pipeline.
"No se aprovechen, y lo repito, no se aprovechen de los consumidores en este momento", declaró Biden en la Casa Blanca. "Nadie debe estar lucrando indebidamente con esta situación. Eso es lo que hacen los hackers. Así son ellos, nosotros no somos así", añadió el mandatario.
El gobierno ya detalló todos los pasos que implementará para reabastecer a las gasolineras en las zonas afectadas.
Las autoridades intervinieron cerraron el ducto el viernes después de que hackers quisieran cobrar un rescate. El ducto entrega alrededor del 45% del combustible de la costa este de Estados Unidos. La situación desató problemas de escasez y un incremento de precios, mismos que el gobierno se prepara para atender.
Horas después que se reanudó el servicio del oleoducto, Biden emitió una orden ejecutiva para mejorar la seguridad cibernética del país.
La hackeo de Colonial Pipeline es otro desafío más de la presidencia de Biden
El oleoducto operado por la empresa Colonial Pipeline fue apagado temporalmente debido a la invasión de sus redes cibernéticas. El gasoducto ya reanudó funciones el miércoles.
Este hecho presenta un desafío más para la presidencia de Biden. El mandatario enfrenta una pandemia, una recesión económica, un aumento de niños migrantes en la frontera sur, la retirada de tropas de Afganistán y acontecimientos internacionales que podrían llevar a una guerra.
El gobierno entiende que la situación conlleva una serie de riesgos políticos y económicos. Las imágenes de automóviles esperando en gasolineras podría entorpecer la agenda política de Biden e incluso poner en riesgo el control demócrata del Congreso.
Biden expresó esperanzas de que el oleoducto reanudará operaciones normales para la semana entrante y enfatizó la importancia de mejorar la infraestructura del país. Aseguró que su gobierno tomará medidas para evitar futuros hackeos, pero no divulgó si la compañía Colonial pagó un rescate.
"No creemos que el gobierno ruso estuviera involucrado en este ataque, pero sí tenemos sólidas razones para creer que los criminales que perpetraron dicho ataque viven en Rusia", expresó el mandatario.
"Además, tomaremos medidas para entorpecer su capacidad de operar, y nuestro Departamento de Justicia ha creado un equipo especial que se dedicará a llevar a justicia a quienes se involucren en ransomware", añadió.
Con información de The Associated Press