Las pruebas de COVID-19 más frecuentes son una clave para ayudar a poner fin a la pandemia. Pero como individuos, no podemos confiar únicamente en las pruebas para protegernos a nosotros mismos y a los demás.
Una prueba negativa no está del todo clara en términos de poder interactuar de manera segura con otras personas sin máscaras u otras precauciones.
La prueba negativa no es como un pasaporte para que las personas salgan y hagan lo que quieran
, dijo Muge Cevik, doctora de la Universidad de Saint Andrews.
Mientras las personas hacen planes para viajar este Día de Acción de Gracias, deben comprender que una prueba negativa no significa que sea seguro estar en contacto cercano con otras personas y no significa que sea seguro quitarse las máscaras.
Una persona puede hacerse la prueba, pero todavía tiene que esperar unos dos o tres días para los resultados. Eso significa que esa misma persona puede estar en contacto con otras personas durante esos días.
Además, las pruebas no son 100 % precisas. Las personas que tienen COVID-19 pueden hacerse la prueba y salir negativos, creando incertidumbre y dejando que las personas piensen que pueden salir.
Esta es la razón por la que las pruebas no reemplazan otras medidas de mitigación de Covid-19, cómo poner en cuarentena a las personas expuestas al virus, el uso de máscaras y el distanciamiento social.
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