El COVID-19 y su variante Delta no dan tregua en el estado de Carolina del Norte.
Tres de los condados del Triángulo están sufriendo el recuento de casos positivos más alto en los últimos sietes meses.
En el condado de Wake la cifra se ha elevado a más de 8,000 nuevos casos en las últimas dos semanas. Es casi el doble, dado que a principios de agosto estaban en poco más de 4,000.
De los 8,301 nuevos casos, 4,232 se dieron en la semana más reciente. Ese es el número más alto en una semana desde finales de enero, cuando se presentaron 9,710 infectados.
Esa cifra eleva el promedio en el condado a 747 nuevos casos por cada 100 mil habitantes.
De las pruebas realizadas, el 8.4 % dieron positivo. El estado tiene claro que para frenar la propagación del virus el objetivo es bajar el número a menos del 5 %.
Desde el inicio de la pandemia, en Wake se tienen contabilizadas 771 personas fallecidas a causa del coronavirus.
En cuanto a la vacunación, se estima que el 64 % de los residentes del condado ya recibió al menos una dosis de la vacuna, mientras que el 61 % está completamente vacunados.
Por su parte, los nuevos casos en Durham también se han duplicado a casi 1,700 en los 14 días más recientes.
En total se tienen registrados 1,692 casos nuevos, con un promedio de 526 positivos por cada 100 mil residentes.
Al igual que Wake, es el número más alto desde la última semana de enero.
Desde el arranque de la pandemia, el condado de Durham ha sufrido la muerte de 243 personas a causa del virus.
Se estima que el 63 % de los residentes ya recibió una dosis de la vacuna del COVID-19, mientras que el 59 % está completamente vacunado.
El tercer condado afectado es Orange, que tuvo 486 nuevos casos en los últimos 14 días, es decir, alrededor de 327 por cada 100 mil habitantes.
En su caso es el recuento semanal más alto desde principios de febrero, cuando se dieron 329 nuevos casos.
Aquí se contabilizan 102 muertes a causa del COVID-19, con todo y que el porcentaje de vacunación es más alto con el 80 % en la primera dosis y 77 % para la segunda.
En el estado, la unidad de cuidados intensivos se encuentra en un nivel récord y múltiples hospitales luchan por no superar su límite.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos de Carolina del Norte dijo que las personas no vacunadas tienen 15 veces más probabilidades de morir a causa del virus.
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