En nuestra cultura latina asociamos las bebidas alcohólicas con celebraciones y hasta como una manera de ahogar nuestras penas. Pero, ¿puedo distinguir si estoy teniendo una dependencia o problemas con el alcohol?
Para algunos puede resultar ofensivo que alguien sugiera o piense que es alcohólico/a y podrían pensar que porque no tiene “borracheras”, no tiene problemas con el alcohol. La realidad es que no es necesario tener borracheras para tener un problema de dependencia al alcohol.
En el alcoholismo hay una dependencia física y psíquica al alcohol que se caracteriza por el consumo descontrolado de bebidas alcohólicas que interfiere con la salud física y mental de la persona. También, afecta las relaciones sociales, familiares y las funciones laborales.
Se utiliza la palabra dependencia porque la persona experimenta síntomas físicos cuando se interrumpe el consumo de alcohol y cambia su tolerancia. Es decir, cuando no consume alcohol el cuerpo reacciona físicamente y cada vez necesita tomar más alcohol para tener los mismos efectos que antes tenía con menos alcohol.
¿En cuánto tiempo se puede desarrollar la dependencia?
La dependencia tiene un patrón progresivo y puede darse en un periodo de 5 a 25 años. Usualmente en las etapas iniciales la persona puede realizar sus tareas cotidianas, aunque puede presentar episodios de violencia, depresión y fuera de la realidad.
En etapas posteriores la persona puede experimentar algunas consecuencias físicas como problemas gastrointestinales o con el sistema nervioso central, lo que va haciendo más difícil realizar sus actividades diarias con normalidad.
Señales de dependencia y problemas con el alcohol:
- Si en algún momento ha pensado en que debe disminuir o eliminar el consumo del alcohol.
- Si le ha molestado las críticas de otros en relación a su consumo de alcohol.
- Se ha sentido mal o culpable debido a sus hábitos de consumo de alcohol.
- Si ha tomado una bebida alcohólica acabándose de levantar en la mañana.
Efectos y riesgos a la salud
El alcohol comienza a tener efectos en los siguientes 10 minutos luego del consumo de alcohol y puede tener un punto máximo de una hora.
El alcohol deprime o baja el sistema nervioso central, y reduce la frecuencia de la respiración, ritmo cardiaco y los mecanismos de control del cerebro, hay una lentitud de las reacciones, y se deteriora nuestra capacidad para la concentración y el juicio.
Debido a estos efectos, hay un aumento del riesgo de accidentes, de suicidios, homicidio, contraer enfermedades de transmisión sexual y en las mujeres embarazadas que consumen alcohol, el niño puede nacer con el síndrome de alcoholismo fetal.
Tratamientos para problemas con el alcohol
La dependencia al alcohol puede ser tratada exitosamente si la persona reconoce que tiene un problema y busca la ayuda necesaria. Hay grupos de apoyo especializados como el de Alcohólicos Anónimos.
Para información sobre estos grupos puede llamar al 704-377-0244 (en Charlotte) o al 919-783-8214 (en Raleigh). Recuerden que esta información no sustituye una consulta con un profesional de la salud emocional. Para mayor información pueden llamar al 984-974-3795.