El inicio no oficial del verano, el Día de los Caídos, es la ocasión perfecta para comenzar a hablar sobre qué nos depara en cuanto al clima y la temperatura de verano en Carolina del Norte este 2023?
Aunque no existen pronósticos tan precisos a largo plazo en cuanto a meteorología, existe algunos indicios sobre el impacto de las temperaturas y las precipitaciones para los meses de junio, julio y agosto próximo.
Prepárate para días calurosos
Según las proyecciones de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) estamos a las puertas de un verano más cálido de lo normal. Se espera en un 40 % la probabilidad de un verano por encima de lo normal en la Tríada y en todo Carolina del Norte, lo que aumentaría el promedio de las temperaturas por mes.
Usualmente, las temperaturas de junio oscilan entre los 62°F y 82°F, mientras que julio es el mes más caluroso con un rango de 69°F, a 88°F, y ya en agosto se estabilizan entre 66°F, y 85 °F.
Siguiendo las proyecciones, que incluyen a las Carolinas, la costa este, oeste y el sur del país, las medias se pueden establecer más cerca de los 90°F, pudiendo hasta superar los tres dígitos en los peores escenarios. No obstante, sí se espera que haya días frescos y parcialmente nublados, gracias a la presencia de algún frente de verano. Todavía no hay modelos que indiquen fechas específicas próximas con este fenómeno.
Pronóstico de precipitaciones aleja la sequía
En cuanto a las precipitaciones, la NOAA pronostica un 33 % de probabilidad de un verano más húmedo de lo normal en las Carolinas. Mientras que la mitad este del país puede experimentar precipitaciones superiores a lo normal, el noroeste del Pacífico y el suroeste de Estados Unidos se estiman más secos de lo normal.
Para los meses de verano, de junio a agosto suele caer un promedio de 12.63 pulgadas de lluvia, con un promedio mensual de 4 pulgadas. Esta temporada puede superar estos límites, por lo que difícilmente puede haber alguna sequía en la región.
Este año, los modelos de sequías del país dejan por fuera de esta posibilidad a la Tríada, aunque sí hay condiciones que aplican a Texas, Panhandle, Oklahoma, Kansas y Nebraska. Estas posibilidades son escasas en muchas áreas gracias a que particularmente en el oeste, el norte de las Grandes Llanuras, el medio oeste y los valles de Tennessee y Ohio, las lluvias intensas del invierno redujeron los pronósticos de sequía.
Esta semana, el NOAA también dijo que la presencia de El Niño, anticipa una temporada normal de huracanes, sin sorpresas en cuanto a un excesivo peligro de tormentas.