Los incendios en Oregon y California continúan sin poder controlarse, las condiciones climáticas, la ola de calor y el viento no han permitido a las autoridades realizar acciones efectivas contra las llamas.
Oregon pide ayuda para sofocar incendios que devastan la región
Es por eso que el estado de Oregon pidió ayuda a las ciudades y gobiernos aledaños para ayudar a sofocar los incendios que hasta el momento abarcan un área más grande que la ciudad de Nueva York.
Además, hay riesgo de tormentas eléctricas, que podrían provocar nuevos incendios y esto provocaría un daño más grave en la región y los estados aledaños.
Uno de los incendios nombrado Bootleg, abarca una extensión de unos mil 391 de kilómetros cuadrados (537 millas cuadradas), ardía 483 kilómetros (300 millas) al sureste de Portland, en el Bosque Nacional de Fremont-Winema y sus alrededores.
La zona es una extensión de bosques antiguos, lagos y zonas protegidas, aunque los daños han sido mínimos, las autoridades continúan en alerta para evitar que se convierta en una catástrofe.
Las condiciones podrían hacer crecer el incendio
Por otra parte, las autoridades del Bosque Nacional Rogue River-Siskiyou, en el sureste de Oregon, pidieron que se preparasen más equipos de fuera por si se producían incendios en la zona.
“Aunque se espera que la actividad de rayos prevista para principios de esta semana se produzca al este de nosotros, estamos preparados para lo peor, y esperamos que ocurra lo mejor”, dijo Mike McCann, asistente de bomberos, en un comunicado.
El temor es que un entorno seco, la sequía y la reciente ola de calor puedan crear las condiciones perfectas para un incendio, de modo que se estaban reuniendo recursos como camiones de bomberos en lugares como Arkansas, Nevada y Alaska.
Las llamas no han alcanzado zonas con gran población
A pesar de estos incendios, las autoridades ven el lado positivo, ya que las llamas no han alcanzado zonas habitables de miles de personas y los daños no han sido tan graves como pudieran ser en un principio.
Al menos 2 mil viviendas han sido evacuadas y 5 mil se han visto amenazadas por el incendio en algún momento. El fuego ha devorado al menos 70 casas y más de 100 estructuras.
Además, por los fuertes vientos, el incendio se expande con rapidez hacia el norte y el este, a zonas cada vez más remotas.
El fuego era uno de los muchos activos en una docena de estados, la mayoría en el oeste de Estados Unidos. Sólo en Oregon y Washington había 16 incendios sin contener.