El Centro de Detención del Condado de Cumberland es una de las múltiples cárceles de la región costera de Carolina del Norte que enfrenta brotes de COVID-19, según registros estatales.
Un brote se define como dos o más casos de COVID-19. Un brote no se considera terminado hasta que pasen cuatro semanas sin un caso positivo de COVID-19.
La Cárcel del Condado de Cumberland tiene un brote de 83 casos entre los reclusos, según un informe del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Carolina del Norte (NCDHHS).
La lista de brotes en el sitio web de NCDHHS se actualiza los martes y viernes.
Brotes de COVID-19 en cárceles del este de Carolina del Norte
El teniente Sean Swain, un portavoz de la Oficina del Alguacil del Condado de Cumberland, dijo que aunque la cárcel del condado tuvo un brote hace meses, el brote actual no incluye casos positivos entre los miembros del personal.
Otras cinco cárceles de la región tienen brotes de COVID-19, según los registros estatales y funcionarios locales, incluyendo las cárceles de los condados de Bladen, Harnett, Lee, Robeson y Moore.
El Centro de Detención del Condado de Harnett reporta un brote de 91 casos, incluyendo 88 reclusos.
El brote en la Cárcel del Condado de Robeson tiene 60 casos COVID-19 activos, incluyendo 39 reclusos. Uno de ellos murió, según NCDHHS.
En la Cárcel del Condado de Bladen, 8 reclusos y 7 miembros del personal han dado positivo por el coronavirus.
La Cárcel del Condado de Lee tiene un brote de seis casos, todos entre los reclusos.
El Alguacil del Condado de Moore, Ronnie Fields, dijo en comunicado que el brote en el Centro de Detención del Condado de Moore incluyó a un recluso y dos oficiales. Los tres están en cuarentena, aseguró Fields.
"Estas pruebas positivas marcan sólo la sexta vez desde el inicio de la pandemia de COVID-19 que un recluso del Condado de Moore dio positivo. Hasta la fecha, todos los que han resultado positivos han sido asintomáticos y se están recuperando", dijo Fields.