El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, vetó el 30 de agosto un proyecto de ley que eliminaba un requisito otorgado por los alguaciles para que se pudieran comprar pistolas en la entidad.
De esa manera, la adquisición de estas armas se facilitaba al descartar la solicitud de un "permiso de pistolas" ante los alguaciles.
"Las leyes de permisos de armas reducen los homicidios y suicidios con armas y reducen la disponibilidad de armas para actividades delictivas",
dijo Cooper en un comunicado.
El Senado de Carolina del Norte aprobó el proyecto de ley el 18 de agosto, pero estaba en manos de Cooper autorizar la normativa o vetarla.
Las organizaciones a favor del derecho a las armas apoyaban la ley porque quitaba un paso en la adquisición de pistolas.
Sin embargo, los activistas pro-desarme veían la medida como una forma de que las armas de fuego llegaran a manos equivocadas.
Actualmente, para solicitar los "permisos de pistolas" seguirá siendo necesario acudir al alguacil del condado donde el comprador del arma de fuego habite. Dependiendo del condado, los requisitos del alguacil pueden variar.
El requisito es obligatorio para quienes no tienen un permiso de transporte oculto de pistolas.
El fiscal general del estado, Josh Stein, agradeció a Cooper en Twitter por su decisión.
"Esta ley ayuda a mantener las armas fuera del alcance de personas peligrosas, lo cual siempre es una buena idea, pero especialmente cuando la violencia armada está aumentando",
tuiteó Stein.