Bares y restaurantes se vieron obligados a cerrar tan pronto comenzó la pandemia.
Y a medida que cerraron en todo el país para limitar la propagación de la COVID-19, la industria se vino abajo.
Dueños de negocios, decenas de miles de camareros, gerentes de bares, meseros, lavaplatos y cocineros se vieron vulnerados.
Pero millones de estadounidenses reciben sus primeras dosis de vacunas y las restricciones ahora comienzan a disminuir.
Por lo que se están explorando formas de ayudarlos a recuperarse en el menor tiempo posible.
Rehabs.com, un proveedor líder de recursos y apoyo para el tratamiento de rehabilitación; realizó una encuesta a 3,180 personas mayores de 21 años.
Y encontró que la mayoría de los habitantes de Carolina del Norte (el 56 %) está a favor de extender las horas de operación en los bares tras la pandemia para ayudarles.
Una ligera disminución en comparación con el promedio nacional del 57 %.
Con las excepciones de Nevada y Louisiana, todos los estados del país tienen requisitos de cierre de centros nocturnos cada día.
Aquellos que se sintieron más convencidos de apoyar a sus establecimientos locales de bebidas son los de Dakota del Sur, con un 90 % a favor.
Comparativamente, solo el 27 % de los de Massachusetts admiten tiempos de operación extendidos.
La investigación también profundizó en cuánto tiempo la gente piensa que se debería permitir a los bares extender su horario de apertura.
La encuesta reveló que los encuestados creen que una extensión promedio de 3.8 horas sería aceptable.
Aunque a los bebedores les gustaría volver a sus establecimientos de bebidas favoritos, parece que solo están dispuestos a hacerlo de manera segura.
Pues más de la mitad (el 55 %) de los encuestados dicen que reportarían una prohibición a las autoridades si no se adhirieran a las regulaciones de distanciamiento social.
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