El gobernador de California, Gavin Newsom, firmó una orden que busca evitar los altos precios de las pruebas de COVID-19 caseras.
Así lo informó la oficina de prensa del estado a través de un comunicado y ante el avance de Ómicron.
Incluso, el estado tuvo que desplegar a 200 elementos de la Guardia de California para ampliar la capacidad en 50 sitios de pruebas en todo el estado.
Newsom firmó la orden este 8 enero y con ella da protecciones al consumidor y asegura un precio justo en los kits de pruebas caseras.

La orden de California prohíbe a los vendedores poner altos los precios a los kits de pruebas de COVID-19 en más del 10 por ciento.
También establece las acciones que se aplicarán contra los especuladores de precios.
El impacto de Ómicron llevó al estado a la apertura de 6 mil sitios de pruebas operados por las autoridades.
De igual forma, desde diciembre se repartieron 9.6 millones de pruebas en las escuelas de California.
California tuvo que aprobar de emergencia un presupuesto de $2.7 millones para atacar de lleno el avance de Ómicron.
Lo que buscan es acelerar la vacunación y apoyar a los trabajadores de primera línea, fortalecer el sistema de atención médica y combatir la desinformación.