Un reporte de The Washington Post asegura que el presidente Donald Trump ha ordenado a sus ayudantes a que no paguen los honorarios legales de su abogado Rudy Giuliani, tras el fiasco legal que significó intentar anular las elecciones presidenciales.
Según personal de la Casa Blanca que habló con el Washington Post, cuando Donald Trump se convirtió el 14 de enero en el primer presidente en tener dos veces un juicio político durante sus funciones, se convirtió en un líder cada vez más aislado, hosco y vengativo.
A menos de una semana para que termine su presidencia, el círculo íntimo de Trump se está reduciendo, las oficinas en la Casa Blanca se están vaciando y el presidente está atacando a algunos de los colaboradores cercanos que le quedan.
El diario citó que Trump está enojado porque sus aliados no han montado una defensa más contundente de su incitación a la turba que irrumpió en el Capitolio la semana pasada, dijeron asesores y allegados.
Suspenden pagos a su abogado Rudy Giuliani
Aunque Trump ha estado excepcionalmente furioso con el vicepresidente Mike Pence, su relación con el abogado Rudolph Giuliani, uno de sus defensores más firmes, también se está fracturando.
Trump ha ordenado a sus asistentes que no paguen los honorarios legales de Giuliani, dijeron dos funcionarios; y ha exigido que él personalmente apruebe cualquier reembolso por los gastos en los que Giuliani incurrió mientras viajaba en nombre del presidente para impugnar los resultados electorales en estados clave.
Dijeron que Trump ha expresado en privado su preocupación por algunas de las medidas de su equipo lega;l y no le gustó una exigencia del abogado Giuliani de pagar $20,000 al día en honorarios por su trabajo para intentar revertir las elecciones.
Ninguna demanda legal avanzó en ninguna corte del país para anular las elecciones de noviembre del 2020.
Pocos lo defienden
Mientras el presidente observaba cómo el juicio político ganaba fuerza rápidamente en la Casa de Representantes; Trump estaba molesto en general porque prácticamente nadie lo estaba defendiendo.
La furia del presidente recayó en muchos de sus otrora leales defensores, incluida la secretaria de prensa Kayleigh McEnany; su asesor principal y yerno Jared Kushner, su asesor económico Larry Kudlow; su asesor de seguridad nacional Robert C. O'Brien y el jefe de gabinete Mark Meadows; quien dejó el cargo de legislador por Carolina del Norte para unirse a la Administración Trump, según The Washington Post.