Un niño de dos años disparó y mató accidentalmente a su padre en Gastonia, Carolina del Norte.
El pequeño creyó que el arma era de juguete, según el medio local WNCT 9.
Markovia Durham, de 29 años, fue hallado muerto por los agentes de la policía el pasado domingo tras recibir varios impactos de bala.
La bisabuela de Markovia, Phyllis Holland, narró los hechos y dijo que el pequeño estaba jugando.
“El papá estaba sentado en el sofá y el bebé se levantó en el sofá y tomó la pistola de detrás del papá. Cogió la pistola sin saber que era una pistola real, se la puso en la espalda y apretó el gatillo pensando que la pistola era un juguete".
Holland aseguró que Durham era muy responsable con su arma y su hijo, pero una distracción le costó la vida.
"Mantiene el arma alejada. Mantuvo el arma lejos de él. En ese momento, simplemente no estaba pensando".
Un vecino lamentó lo ocurrido y sintió compasión por el pequeño, que crecerá sin su padre.
"Simplemente odio esto por ese niño, porque su vida está arruinada porque, ya sabes, era su papá. Y si hizo eso, ese niño pequeño va a pasar por algo por el resto de su vida y me duele porque tengo mis propios nietos", comentó Tasha Phillips.
De acuerdo a su familia, el niño sigue preguntando por su padre, pues aún no alcanza a comprender lo que pasó.
"Quiere a su papá. Solo tiene dos años. No lo entiende", agregó la bisabuela.
El pasado lunes, trabajadores del Departamento de Servicios Sociales visitaron a la familia para entrevistarla.
Hasta el momento no se han presentado cargos en al caso.