David Currie, el renombrado experto en pimientos picantes de Carolina del Sur, famoso por haber creado el Carolina Reaper, ha dejado al mundo atónito una vez más al presentar su último logro: el Pepper X, un pimiento que supera al Reaper en nivel de picante y que ha sido oficialmente reconocido como el pimiento más picante del mundo por el Libro Guinness de los Récords Mundiales.
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¿Qué tan picante es el pimiento más fuerte del mundo?
Cuando David Currie probó el Pepper X por primera vez, experimentó un calor abrumador durante tres horas y media, seguido de calambres agonizantes. Currie, uno de los cinco valientes que se han atrevido a comer un Pepper X completo, describe la experiencia como inolvidable.
Los pimientos se miden en unidades de calor Scoville, y Pepper X ha alcanzado un asombroso promedio de 2.69 millones de unidades, superando con creces las capacidades del Carolina Reaper, que se ubica en 1.64 millones de unidades.
Incluso en comparación con productos utilizados por la policía para controlar disturbios, como el gas pimienta con 1.6 millones de unidades y el spray para osos con 2.2 millones de unidades, Pepper X es un verdadero desafío.
¿Cómo es el Pepper X?
La búsqueda de David Currie para crear el pimiento más picante comenzó en 2013 con el Carolina Reaper, una fruta de aspecto llamativo que se asemeja a un escorpión.
Su objetivo era desarrollar un pimiento extremadamente picante pero con un toque dulce. El Pepper X, de color amarillo verdoso y sabor terroso una vez calentado, es el resultado de un cruce entre el Carolina Reaper y un pimiento misterioso enviado por un amigo de Michigan.
El picante más fuerte del mundo
David Currie ha dedicado dos décadas de su vida a alcanzar su sueño de crear el pimiento más picante del mundo. A medida que continúa su incansable trabajo en campos, invernaderos secretos y en su tienda en Fort Mill.
¿Cómo funciona el picante?
La sustancia química que causa la ardiente sensación en los pimientos, la capsaicina, pertenece a la misma familia que el arsénico, pero es inofensiva a menos que se consuma en grandes cantidades.
Los humanos y otros mamíferos perciben la capsaicina como una amenaza y experimentan una intensa sensación de ardor. No obstante, esta sensación libera endorfinas y dopamina en el cuerpo.
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