A pesar de que millones de personas esperan con ansias el Black Friday, las increíbles ofertas y descuentos no se hicieron presentes como antaño, esto por diversos factores que evitaron que las grandes cadenas ofrecieran una gran cantidad de productos.
Black Friday se vivió con ofertas limitadas y una escasa oferta de productos
Miles de personas soportaron las inclemencias del frío para hacer largas filas, todos esperando ofertas y descuentos nunca antes vistos, pero esto no sucedió y muchos clientes compraron menos de lo que esperaban adquirir.
Una gran cantidad de minoristas en el país ofrecieron este año rebajas de precios menores, debido a una escasa oferta de productos e inventario en sus tiendas.
Este año no se observaron las multitudes que acuden a comprar el día después de la fiesta de Acción de Gracias, ya que las tiendas no ofrecieron desde un principio grandes descuentos y hasta resultaba mejor pedir los productos en línea.
Así también, la aparición de la variante Ómicron hizo que los mercados bursátiles se desplomaran a nivel mundial, ante esta incertidumbre, las tiendas no se arriesgaron a mejorar sus precios.
Los minoristas no mostraron grandes cantidades de ofertas en los aparadores
Por otra parte, los locales mostraron la menor cantidad de productos en liquidación en cinco años o más, dijeron analistas de Cowen. Muchos compradores optaron por recoger la mercancía en lugar de aventurarse dentro de las tiendas.
Los comercios esperaban vender entre $8,800 millones y $9,200 millones, pero apenas superaron los $6,000 millones.
Walmart y Target superaron a otras minoristas en parte debido a sus servicios de compra en línea y de Pick Up, pero no esto los salvó de tener una jornada negra en ventas.
Se espera que varios minoristas como Walmart, Target y Best Buy registren menores márgenes de ganancias en el cuarto trimestre debido a la escasez de inventarios y a los mayores costos de las materias primas, los fletes y la mano de obra.