Un estudiante de la Universidad de Carolina del Norte en Wilmington no quiso vacunarse contra la COVID-19, se contagió y murió tras varios días en el hospital, por lo que su madre le dedicó un emotivo mensaje a su hijo fallecido.
El nombre del joven era Tyler Gilreath, de 20 años, que pensó no era buena idea vacunarse contra la COVID-19.
Gilreath estaba convencido de que podía vencer la enfermedad sin necesidad de la inoculación.

La madre, Tamara Demello, confirmó que su hijo murió por COVID-19 luego de presentar muerte cerebral, por lo que le dedicó un mensaje.
Los doctores desconectaron el soporte vital de Tyler al ver que era imposible salvarlo.
'Es una situación devastadora. Dejará un hueco en nuestro corazón que nunca podrá ser llenado', dijo Demello.
Tyler pasó tres semanas muy grave en el hospital, luego de contagiarse de COVID-19 a finales de agosto.
Todo se complicó cuando el joven estudiante desarrolló una infección en los senos nasales que se le fue hasta su cavidad craneal.
Eso provocó una inflamación en su cerebro, por lo que los doctores decidieron desconectarlo a finales de septiembre.
El mensaje de la madre a su hijo muerto
Tamara Demello escribió emotivo mensaje para su hijo a través de su cuenta de Facebook.
'Mi hijo Tyler perdió la batalla contra un problema cerebral que se desató tras contraer una enfermedad sinusal. La infección de los senos nasales fue el resultado de covid, mismo que contrajo tres días después de trasladarse a la Universidad de Carolina del Norte, en Wilmington.'
Demello no dejó de lado a todas las personas que, al igual que su hijo, no quieren vacunarse contra la Covid-19.
'Simplemente no sabes cómo te va a afectar el covid-19. Aunque seas fuerte y estés sano, simplemente no se sabe. ¿Cuál es el problema? Es una inyección, te la pones, puedes estar enfermo un día y ya está. Por favor, ¡hazlo!'
La madre intentó varias veces convencer a su hijo de vacunarse, pues Tyker era un joven sano.
Pero el estudiante de la Universidad de Carolina del Norte era muy terco respecto a la vacuna.
'Esto fue dos semanas antes de que se mudara a la universidad. Se lo estaba pasando bien, terminando sus pendientes y viendo amigos.'
A pesar de que Tyler mostró ligera mejoría en el hospital, la enfermedad se agravó y llegó la muerte cerebral.
Su madre decidió donar los órganos y tejido de Tyler, lo que será de mucha ayuda para 80 personas.
Gilreath había cedido a vacunarse para el 30 de agosto con motivo del cumpleaños 60 de su madre.
Lo haría una vez que hubiera regresado a la universidad, pero ya no lo logró.