Una vez que diversos gobiernos en el mundo se unieron para incautar propiedades rusas, las autoridades de Italia anunciaron que investigan un yate con valor de más de $700 millones y que sería propiedad de Vladimir Putin.
Te puede interesar:
Autoridades italianas investigan quién es el dueño del yate de $700 millones
Una vez que las autoridades detectaron que el yate pertenecía a Putin, comenzaron a acordonar el área e incautaron la propiedad. Ahora, investigarán si pertenece al Presidente de Rusia y sí es parte de sus bienes, podría quedar en manos del gobierno italiano.
De acuerdo con un reporte del Gobierno de Joe Biden, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, sería el dueño del vehículo y de esta forma, incautarían un millonario artículo que pertenece al zar.
El Scheherazade es un enorme barco de lujo, una vez que el gobierno italiano se dio cuenta que pertenecía a Vladimir Putin se encaminaba a partir, pero lograron detenerlo.
Durante la noche del viernes, la policía italiana abordó el yate, que mide 459 pies de largo, tiene dos cubiertas para helicópteros, un gimnasio y una piscina convertible en pista de baile.
Ante la posibilidad de que zarpara, las autoridades italianas dijeron a la tripulación que el barco no se moverá hasta que termine la investigación.
Por su parte, el Ministerio de Finanzas italiano anunció que una investigación había establecido que el dueño del barco, a quien no nombró, era un individuo que “amenazaba la paz y la seguridad internacional”.
¿Qué pasa si el yate es propiedad de Vladimir Putin?
Una vez que hallen al dueño, si resulta ser Vladimir Putin, el barco será incautado y puesto a disposición del gobierno italiano y se uniría a las villas y otros yates pertenecientes a oligarcas rusos sancionados, dijeron en un comunicado.
De acuerdo con las autoridades italianas, el barco se encuentra en el puerto de Marina di Carrara, en la costa norte de Toscana.
Algunos medios italianos señalan que Eduard Khudainatov, un magnate petrolero ruso que actualmente no está bajo sanciones, es propietario del yate, pero todavía falta que lleguen a la verdad por posibles triángulos financieros.
El capitán del barco, Guy Bennett-Pearce, le dijo recientemente a The New York Times que el dueño del barco no está bajo sanción y que nunca vio a Putin navegar sobre el vehículo