Un oficial de policía de Arizona ha conmovido al país después de llevar su servicio por la comunidad más allá de su trabajo al adoptar a una pequeña víctima de abuso infantil.
Cuatro años atrás, Brian Zach, teniente de policía de la ciudad de Kingman, conoció a Kyla durante un chequeo de asistencia social. La pequeña, en ese entonces de dos años, necesitaba ayuda y tocó el corazón de Zach.
"Tenía una fractura de cráneo, hemorragia cerebral y dislocación del codo. Mi corazón sufría por esta niña que estaba cubierta de moretones", explicó Brian.
Brian Zach no lo dudo y se ofreció para que Kyla viviera en su casa temporalmente en lo que se resolvía su situación y le encontraban un hogar permanente.
"Dijeron que sólo pasarían un par de semanas a un mes hasta que pudieran encontrarle un lugar donde vivir", contó Zach.
"Jugamos semana a semana, mes a mes, fecha de la corte por fecha de la corte, sin saber cuánto tiempo tendríamos realmente", agregó.
Sin embargo, la llamada que se pararía a Zach y Kyla nunca llegó. Lo que en un principio eran un par de semanas, se convirtieron en cuatro años. Finalmente, Brian adoptó oficialmente a Kyla.
El detective Heath Mosby, colega y amigo de Brian, aseguró que quedó sorprendido con el gran corazón de su compañero.
"Me quedé asombrado. Nunca escuché que ninguno de nuestros oficiales hiciera eso. Cuando finalmente se redujo a la adopción definitiva, fue increíble. Fue como ¡wow, esto realmente está sucediendo!", expresó Mosby.
Zach cree que Dios le envió a Kyla y que estaban destinados a estar juntos.
"Ella es tan amorosa que Dios me la envió por una razón, y estoy muy agradecido por eso", contó con emoción.
Pero el gran corazón de Zach aún tiene más espacio, pues aseguró que espera poder adoptar más niños en el futuro.