A los 12 años, un niño suele pedir de regalo de cumpleaños algún juguete, ropa, calzado o videojuegos. Sin embargo, un pequeño de Nueva Jersey pidió algo muy poco usual, la vacuna contra el COVID-19.
Luego de que el padre de Gavin Roberts murió a causa del coronavirus, el peculiar niño pidió de regalo de cumpleaños la vacuna para cuidar de él y de su familia.
El día de su cumpleaños, la madre de Gavin, Alice Roberts, de 46 años, llevó a su hijo a una farmacia para que lo inmunizaran con la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer.
De acuerdo a The Washington Post, el pequeño Gavin ingresó a la farmacia con una cruz que su padre llevó durante su estancia en el hospital el año pasado. Alice tomó fotos del especial momento para su hijo.
"Si un niño puede ver con claridad la necesidad y la importancia de algo y puede ver que la salud es más importante que cualquier cosa material, entonces no entiendo qué es lo que está reteniendo a la gente", dijo Alice.
De esta forma, el caso del pequeño Gavin ha generado conciencia en Estados Unidos, donde a pesar del gran número de vacunas disponibles, el gobierno ha luchado para que la población se vacune.
El 21 de abril de 2020, la vida de Gavin cambió por completo. Su padre, Charles 'Rob' Roberts, se desvaneció en su casa mientras hablaba con los servicios de emergencia.
Charles, de 45 años y oficial de policía de Glen Ridge, presentó síntomas de COVID-19 a principios del mes de abril. Los primeros exámenes médicos fueron mal etiquetados y esperaron nuevos diagnósticos.
Roberts fue llevado al hospital y una semana después perdió la vida tras la difícil decisión de su familia de desconectarlo de un respirador debido a que su cerebro ya había perdido mucho oxígeno.
“Mi padre era como mi mejor amigo en cierto modo. Siempre fue mi entrenador de beisbol, de futbol y estaba presente en mis partidos de hockey. Incluso cuando estaba en mi trabajo siempre venía a la pista, me ataba los patines y me veía jugar”, contó el pequeño a abc7NY.