Una rara explosión interestelar será visible a simple vista desde la tierra este verano, de acuerdo con la NASA.
El evento celeste, apodado como T Coronae Borealis o Estrella Blaze, se encuentra a 3,000 años luz de distancia y está compuesto por una enana blanca, un remanente de una estrella muerta del tamaño de la Tierra, y una antigua gigante roja que lentamente está siendo despojada de hidrógeno por la atracción gravitacional de su vecina.
El hidrógeno de la gigante roja se acumula en la superficie de la enana blanca, provocando una acumulación de presión y calor. Con el tiempo, desencadena una explosión termonuclear lo suficientemente grande como para hacer volar ese material acumulado",
detalla el comunicado de la NASA.
La NASA aclaró que no hay que confundir una nova con una supernova, que es una explosión final y titánica que destruye algunas estrellas moribundas.
En un evento de nova, como el que podrá apreciarse, la estrella enana permanece intacta, enviando el material acumulado al espacio en un destello cegador. El ciclo suele repetirse a lo largo del tiempo y dicho proceso puede durar decenas o cientos de miles de años.
Hay algunas novas recurrentes con ciclos muy cortos, pero normalmente no vemos un estallido repetido en la vida humana, y rara vez uno tan relativamente cerca de nuestro propio sistema. Es increíblemente emocionante tener este asiento en primera fila",
dijo la doctora Rebekah Hounsell, de la NASA.
¿Cuándo será visible la nova este 2024?
La nova que será visible fue vista por última vez desde la Tierra en 1946 y, de acuerdo con un comunicado de la NASA, tiene un comportamiento similar al observado antes de la erupción de 1946, por lo que si el patrón continúa, podría ser visible en septiembre de este año.
La explosión es ideal para observarla en noches despejadas y puede identificarse localizando las dos estrellas más brillantes del hemisferio norte, Arcturus y Vega y siguiendo una línea recta de una a la otra, lo que llevará a los observadores del cielo a Hércules y la Corona Boreal.
La erupción será breve y visible a simple vista poco menos de una semana, pero los científicos confían en que será un espectáculo digno de ver.
Es un evento único en la vida que creará muchos nuevos astrónomos, brindando a los jóvenes un evento cósmico que podrán observar por sí mismos, hacer sus propias preguntas y recopilar sus propios datos. Alimentará a la próxima generación de científicos",
señaló Hounsell.