Estados Unidos requerirá que los pasajeros llegados en avión desde Gran Bretaña den negativo en una prueba de COVID-19 antes de embarcar, según anunciaron el jueves por la noche los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
La medida se suma a las restricciones impuestas por otros países debido a una nueva variante del coronavirus, que se está expandiendo por Gran Bretaña y otros lugares.
Los pasajeros de vuelos llegados de Gran Bretaña tendrán que presentar una prueba negativa de COVID-19 realizada en los tres días previos a su viaje y proporcionar los resultados a su aerolínea, indicaron los CDC en un comunicado. La orden se firmará el viernes y entrará en vigencia el lunes.
Los aerolíneas deben negar el embarque a cualquier pasajero que no se haya hecho una prueba, indicaron los CDC.
La agencia dijo que debido a las restricciones de viajes impuestas desde marzo, los vuelos a Estados Unidos desde Gran Bretaña ya han caído un 90 %.
El primer ministro británico, Boris Johnson, dijo el fin de semana pasado que la nueva variante del virus parece expandirse con más facilidad que las anteriores, y se estaba expandiendo con rapidez por Inglaterra. Docenas de países han prohibido los vuelos desde Gran Bretaña.
La Noticia produjo esta nota con información de The Associated Press.