Después de un gran partido, León derrotó merecidamente a Pumas para coronarse como el nuevo campeón de la Liga MX y sumar su octava estrella en su historia.
El conjunto dirigido por Nacho Ambriz se sacudió las dudas del partido de Ida, donde Pumas fue mejor, y doblegó a un conjunto universitario carente de ideas.
Los Panzas Verdes comenzaron el juego volcados al ataque y a los 12 minutos dieron el primer paso hacia su octavo título. Fernando Navarro filtró un gran balón a Emmanuel el "Puma" Gigliotti, que definió con un disparo de pierna derecha que Alfredo Talavera no atajó correctamente.
León dominaba el encuentro, pero Pumas no pretendía vender barata la derrota. Los dirigidos por Andrés Lillini emparejaron el encuentro en los últimos minutos del primer tiempo; sin embargo no pudo anotar el gol del empate.
El segundo tiempo inició con la misma tónica del primero, León lanzado al frente y Emmanuel Gigliotti pisando con peligro el área de Pumas. Los universitarios intentaban hacer daño a León, pero ante los fallidos intentos frente a una zaga defensiva encabezada por el experimentado central, Nacho González, los capitalinos comenzaron a quedarse sin ideas y tuvieron que recurrir a los centros sin éxito.
Ambriz decidió darle descanso a algunos jugadores. Los cambios de Nacho se notaron de inmediato y en un contragolpe, el recién ingresado, Yairo Moreno, entró al área, recortó y definió entre las piernas de Talavera para marcar el segundo gol que liquidó a Pumas.