La muerte de Hania Aguilar aún carcome de rabia y frustración a Celsa Hernández, madre de la menor que a sus 13 años fue secuestrada y asesinada por Michael McLellan.
Fue la lluviosa mañana del 5 de noviembre de 2018 cuando agentes de la Oficina Federal de Investigación (FBI) y oficiales del Departamento de Policía de Lumberton encontraron en el condado de Robeson el cadáver de Hania.
“Aquí en Lumberton hay una familia que ya no espera Acción de Gracias o Navidad, sino que hay una madre y dos hermanas que lloran el asesinato de una hija y hermana”, dijo la madre de Hania a Qué Pasa.
Postergan su audiencia
La niña fue secuestrada y violada para luego ser asesinada a manos de Michael Ray McLellan, de 34 años, quien en dos ocasiones ya había sido arrestado por violación, pero fue dejado en libertad porque agentes del condado no usaron correctamente el kit para recopilar evidencia de los delitos sexuales.
Así lo reveló el fiscal de distrito del condado de Robeson, Luther Johnson Britt después del proceso.
De acuerdo con la madre, las autoridades de la corte del condado Robeson “solo dan excusas” para postergar la audiencia, según dijo en la reciente entrevista con el citado medio.
Así ocurrió el crimen
Aquella mañana, McLellan interceptó a Hania cuando la pequeña iba a encender el auto de su tía, quien la llevaría a la escuela, y su familia no volvió a verla con vida jamás.
La buscaron sin descansar hasta que el 28 de noviembre, su cuerpo fue hallado sin vida en una zona pantanosa. La autopsia reveló que había sido violada y posteriormente asfixiada.
Fue vinculado públicamente como autor del asesinato de la menor de edad el 8 de diciembre de ese año, pero las autoridades lo acusaron formalmente de 10 cargos, solo que ninguno relacionado con la muerte de Hania.

Exigen justicia
McLellan fue culpado por haber atacado a otra mujer a quien también quiso secuestrar y robar el 15 de octubre en el condado Robeson.
Según los registros de la corte del condado Robeson, será hasta el 23 de febrero de 2021 cuando McLellan deba responder por los cargos de posesión de un arma de fuego, secuestro en segundo grado y robo con un arma. Cargos no asociados con la muerte de Hania.
“Nunca olvidaremos que el sistema de justicia no está a favor de Hania. Lo único que quiero justicia”, enfatizó la madre.