Según se reporta en Reino Unido, la última ola de contagios por COVID-19, la cual fue ocasionada por la variante Ómicron, dejado 670 muertos.
Según un análisis de Daily Mail, el cual estuvo respaldado por expertos, sugiere que Ómicron sería 100 veces menos que la variante Delta.
Aunque está siendo mucho menos letal que la anterior variante, sí es más contagiosa, por lo que no se debe bajar la guardia. Incluso tiene la letalidad que la influenza estacional, en la cual por cada 1,000 enfermos solo uno muere.

La investigación de la Universidad de Washington, dice que la tasa de letalidad de la variante Ómicron sería de alrededor de 0.07%, lo cual quiere decir que mataría a uno de cada 1,430 personas enfermas de COVID-19 por esta cepa.
Pese a esto, los expertos piden no bajar la guardia, pues aún están las otras variantes esparciéndose; además que permitir que se siga expandiendo daría lugar a nuevas cepas.