Charlotte - Un joven latino se enfrenta a una inminente deportación luego de quedar bajo custodia de Inmigración tras ser arrestado por supuestamente cometer un hurto en su lugar de trabajo.
Gustavo “Gus” Zamudio Alguilar era beneficiario de la Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA), la cual perdería al ser acusado de un delito. El joven trabajaba como cajero en un supermercado Harris Teeter, y lo acusaron de sustraer $2,907.
Gustavo, quien recientemente cumplió 18 años, fue detenido el 25 de febrero y llevado a la cárcel local donde fue procesado mediante el programa 287(g) quedando bajo custodia del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
Al momento el joven de origen mexicano, se encuentra en el Centro de Detención Stewart, en Lumpkin (Georgia) y desde allí lucha para no ser deportado.
“Ahora mismo tiene dos abogados, el criminal está buscando las pruebas que tienen para exonerarlo del cargo, mientras que el de inmigración va a solicitar una fianza con el juez de Stewart”, contó a La Noticia Byron Martínez, de la organización Unidos We Stand.
Campaña de ayuda
Martínez contó que fue contactado por una maestra de Gustavo, quien cursaba el grado doce en la Secundaria de Artes Northwest. “Todos en la escuela están sorprendidos de que esté arrestado”, dijo.
Sus compañeros crearon el 4 de marzo la página: “Keep Gus Home”, en la plataforma GoFundme, con la meta de recaudar $25,000 para ayudar en los gastos legales del joven. Desde entonces han sido donados $2,331 por 70 personas.
“Gus ha estado aquí prácticamente toda su vida, se suponía que se graduaría con nosotros en tres meses y medio, e iría a la universidad para ser un abogado. Ahora todo le ha sido quitado”, dijo Devin Bauer, compañero de Zamudio.
El fondo de GoFundme se encuentra en la página: www.gofundme.com/keepgushome
Madre desesperada
Gustavo llegó al país a la edad de seis años, y vive con su madre, su padrastro y dos hermanitos nacidos en este país. Desde mayo de 2016 trabajaba en el supermercado a medio tiempo.
“Él ha sido un chico muy estudioso, llevaba buenas calificaciones, le gusta hacer amigos, y es la primera vez que tiene problemas. Ahora lo están acusando de algo, de cual no se ha declarado culpable”, comentó María Aguilar, madre del joven.
La madre contó que su hijo fue arrestado en su trabajo, y desde entonces ha podido hablar unas pocas veces con él desde que fue trasladado a Georgia.
“Es mi hijo, no asimilo la situación. He llorado y orado mucho por él, aún no entiendo qué fue lo que pasó, es un chico que no fuma, no toma, nada”, comentó la mujer.
Aguilar mencionó que Gustavo tuvo un inconveniente con un compañero de trabajo meses atrás, por supuestamente no haber cubierto su turno. “Tuvo que hablar con sus jefes, pero al parecer todo se solucionó”, indicó.
La madre dijo estar muy triste, porque si su hijo es deportado, llegará a un país que desconoce. “Él está acostumbrado a vivir aquí, y en México viven sus abuelos y una tía a quienes no conoce. Lo que espero es que le den una fianza y le den a mi hijo una segunda oportunidad”, añadió.