El tribunal supremo de las Naciones Unidas (ONU) ordenó a Rusia a detener el avance militar en Ucrania, así como otorgar las medidas solicitadas por el gobierno ucraniano.
Kyiv pidió a la Corte Internacional de Justicia intervenir en el conflicto, con el argumento de que Rusia violó la Convención de Genocidio de 1948, pues acusó a Ucrania de cometerlo en la región de Donbass, lo cual usaron como pretexto para la invasión.
Fue así que el tribunal ordenó de inmediato que terminen las acciones militares de Rusia en Ucrania.
“La Federación Rusa suspenderá inmediatamente las operaciones militares especiales que inició el 24 de febrero de 2022″, dijo la presidenta de la corte, la jueza estadounidense Joan E. Donoghue.

Si no acata la orden, Rusia sería remitido al Consejo de Seguridad de la ONU; sin embargo, Moscú tiene poder de veto en él.
Los representantes rusos no asistieron a la audiencia programada la semana pasada, donde Ucrania aseguró que inició una "agresión no provocada" y ha ocasionado una catástrofe humanitaria con miles de bajas y civiles huyendo por sus vidas.
Rusia no cree que la ONU pueda entender el conflicto con Ucrania
Sin embargo, en un mensaje por escrito, Rusia argumentó que la corte carecía de jurisdicción para entender el caso y que no pueden prohibirle usar la fuerza. Por tal motivo se piensa que el país no hará caso al llamado.

La decisión fue aprobada por 13 votos contra dos, la corte dijo a Moscú que garantice que las unidades militares “no tomen medidas” para prolongar el conflicto, que Rusia califica de “operación militar especial”. Los votos en contra fueron de los jueces ruso y chino.
No se sabe cuál será el paso a seguir en caso de que Rusia se niegue a acatar la orden.