En 2016, un minero llamado Neil Loveless encontró a la momia de lobo más antigua y mejor conservada hasta la fecha en el Yukón canadiense mientras exploraba una pared del permafrost.
Los paleontólogos que examinaron la momia determinaron que se trataba de una hembra joven que habitó en un ecosistema desaparecido del noroeste de Canadá que era habitado por mastodontes y demás fauna del Pleistoceno. La momia fue nombrada Zhur, que significa “lobo” en el idioma local de Tr’ondëk Hwëch’in, comunidad donde fue hallada.
Otros descubrimientos parecidos del Pleistoceno se dieron en la tundra siberiana, los ejemplares encontrados se remontan a un periodo de entre 2,6 millones y 11 mil 700 años, una época que se conoce también como la Edad de Hielo. Sin embargo, no había un registro de un ejemplar como Zhur en el Yukón.
"En Siberia, una preservación como esta es bastante habitual debido a la forma en que el permafrost preserva las cosas en la región, algo mucho menos común en el Yukón, Alaska y otras partes de Norteamérica", afirma Julie Meachen, paleontóloga de la Universidad de Des Moines y autora de un estudio publicado en la revista Current Biology que describe a Zhur.
Durante el interglaciar en que vivió la cría de lobo, habitaron otros animales como camellos, castores gigantes y mastodontes. Los glaciares árticos se desvanecieron temporalmente y los bosques superaron los pastizales.
"Preservar un carnívoro de forma tan extraordinaria nos ofrece una oportunidad única para analizar los ecosistemas de la Edad de Hielo desde el punto de vista de un depredador", dijo el paleontólogo de la Universidad McMaster, Tyler Murchie.
El hallazgo de Zhur es aún más increíble porque se trata de una especie única, debido a que el lobo gris no evolucionó en América, los únicos ejemplares que evolucionaron fueron los que cruzaron el estrecho de Bering hacia Europa y Asia hace más de 500 mil años.
"Zhur data de un período de tiempo que no es muy conocido en el Yukón en materia de momias", dice Barnett cuando examinaron los restos del ADN.