Arqueólogos se mostraron sorprendidos por haber descubierto los restos de un esqueleto humano de 7,200 años, los cuales serían de una cazadora y recolectora de Indonesia; pero el ADN es de un grupo humano que nunca antes se había detectado.
El fósil fue examinado por los expertos, quienes revelaron que la mujer tendría entre 17 y 18 años de edad. Fue enterrado en posición fetal en una cueva de Leang Pannige al sur de Silawesi.
En el sepulcro de encentraron artefactos del pueblo toaleno, una cultura de cazadores y recolectores de la región. Esta es la primera vez que se encuentran restos con ADN de un poblador toaleno.

“Esta es la primera vez que alguien informa sobre el descubrimiento de ADN humano antiguo de la vasta región insular entre Asia continental y Australia“, dijo Adam Brumm, arqueólogo del Centro australiano de investigación para la evolución humana de la Universidad Griffith en Brisbane en la revista Nature.
Además de la sorpresa de este nuevo ADN, los científicos se mostraron muy emocionados al poder encontrar el esqueleto humano con restos que pudieran ser estudiados; pues en ese tipo de regiones es complicada la investigación, pues el ADN se degrada fácilmente en clima tropical.
“Es muy raro encontrar ADN humano antiguo en los trópicos húmedos, por eso es un descubrimiento muy afortunado”.
El grupo al que pertenecía la mujer era relacionado con los indigenas australianos actuales; sin embargo, el grupo humano es completamente desconocido y es la primera vez que se encuentra.
Este descubrimiento rebate varias teorías sobre la llegada de los humanos a la región; además abrirá teorías y trabajos relacionados con las islas Wallacea de Indonesia.