Tras las acusaciones de Estados Unidos sobre el posible origen de la enfermedad COVID-19 en un laboratorio de China, el ministro de Relaciones Exteriores de ese país, Wang Yi, criticó que se se esté intentando "politizar" el rastreo del origen de la enfermedad.
El funcionario pidió al gobierno de la administración de Joe Biden, que muestre datos y que verifique las muestras recolectadas en Estados Unidos durante el inicio de la pandemia; además catalogó al gobierno estadounidense como "irrespetuoso con la ciencia y la justicia".

Además señaló la necesidad de que se invite a los expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a que investiguen el laboratorio estadounidense Fort Detrick, además de otras 200 instalaciones para "rastrear el origen del coronavirus lo antes posible".
"Estados Unidos debería invitar a los expertos de la OMS a investigar la Universidad de Carolina del Norte y publicar los datos relacionados con los casos entre soldados estadounidenses que asistieron a los Juegos Mundiales Militares en 2019 en Wuhan".
Y es que ha habido acusaciones de que China fue el creador de la COVID-19 y que ésta escapó de uno de sus laboratorios, lo cual ha levantado mucha polémica, pues no se ha podido comprobar esta acusación.