Tras las protestas que se desataron el pasado 11 de julio en Cuba, en las que miles de habitantes de la isla salieron a las calles para manifestarse contra la profunda crisis económica y sanitaria que viven, muchos de los actores políticos y sociales del país coincidieron en que se necesita un diálogo nacional con el presidente Miguel Díaz-Canel, excluyendo quienes 'coquetean con la anexión' a Estados Unidos.
Los enfrentamientos entre partidarios y contrarios al gobierno han mantenido a Cuba en una tensión constante. Más de treinta localidades tuvieron enfrentamientos contra la policía, asaltos a comercios y apedreo a hospitales.
El gobierno solo ha reconocido un muerto y no ha informado la cantidad de detenidos y heridos durante los disturbios en el país.
'Creo que (lo ocurrido esos días) es un antes y un después por lo inédito del hecho para nosotros. No creo que sea un capítulo más; es algo de gravedad que nos lleva a reflexiones y espero que a medidas inmediatas. En Cuba vivimos una situación de estrés social que se acrecienta y estoy consciente de que no solo es culpa del bloqueo de Estados Unidos', señaló Silvio Rodríguez, considerado uno de los símbolos de la revolución cubana.
'Si en Cuba va a haber un solo partido este debe ser muy abierto, inclusivo, ecuménico, aunque tenga metas estratégicas, El país y sus instituciones se deben a toda la ciudadanía, no solo a los que piensan de una forma', acotó el histórico trovador.
Por su parte, el presidente Miguel Díaz-Canel no ha parado de reunirse con economistas y académicos para retomar las reformas económicas que llevan detenidas desde hace 10 años en la isla.
En ellas se contempla que una empresa estadunidense opere en la isla, que haya diálogo con jóvenes universitarios y emprendedores del incipiente sector privado, así como con líderes religiosos, y se busca la aprobación de un decreto-ley sobre micro, pequeñas y medianas empresas privadas.
'Si hemos podido en algo tan colosal y difícil (como la creación de tres vacunas propias anti covid-19), ¿qué no podremos hacer en otras áreas? Y sobre todo, cuánto no podremos si articulamos los diálogos pendientes, rescatando la obra social y promoviendo mayor atención a sectores vulnerables', dijo el presidente.
Uno de cada tres cubanos en la actualidad nació después de la desaparición de la Unión Soviética, principal aliado del socialismo cubano. Lo que demuestra que los jóvenes que salieron a las calles a protestar ya no tienen ese sentido romántico de la revolución de 1959.
'Todas las generaciones traen algo propio; lenguajes, reivindicaciones; todas las generaciones traen su dosis de continuidad y también de ruptura', acotó el mismo Silvio Rodríguez.